Envían a prisión a un hombre por saltarse 16 veces el confinamiento y se suicida

La prisión de Logroño se despierta conmocionada por un suceso que ha salpicado las intalaciones penitenciarias de esta ciudad: el pasado 20 de abril, un hombre de 40 años, de profesión ganadero, ingresó en esta cárcel después de haber sido denunciado hasta en 16 ocasiones por las fuerzas y cuerpos de seguridad por saltarse el confinamiento. En la última ocasión que lo hizo, esta persona fue interceptada en un pueblo a 6 kilómetros de la capital, portando droga en los calcetines y acompañado de una mujer.

Después de pasar a disposición judicial, entró en la prisión, donde llevaba ya dos semanas en 'aislamiento sanitario' por la probabilidad de que, en una de las veces que se saltó el confinamiento, pudiera haber contraído el coronavirus. Por este motivo, no se le pudo asignar un acompañante como medida del protocolo antisuicidios que establece cada cárcel en casos como este.

Fue el pasado domingo cuando, después de que un preso hablase con el ganadero a través de la ventana de la celda y descubriera las intenciones de un suicidio, el personal funcionario de la instalación penitenciaria acudió rápidamente al habitáculo para descubrir cómo el interno se había ahorcado. Tras casi media hora intentando reanimarlo sin éxito, se certificó su muerte.