A Caparrós le 'hierve la sangre roja' al ser distinguido por el club de su vida

"Mi mejor título es ser sevillista, y en Sevilla hay que mamar", proclamó el técnico utrerano

Joaquín Caparrós recibió el II Banquillo de Oro 'Ramón Encinas', distinción que concede el Sevilla a entrenadores destacados en su historia

Joaquín Caparrós, homenajeado por el Sevilla

Joaquín Caparrós, homenajeado por el Sevilla

EFE

Joaquín Caparrós recibió este martes el II Banquillo de Oro 'Ramón Encinas', una distinción que concede el Sevilla a entrenadores que han destacado en su historia y que en esta ocasión recayó en el utrerano, quien volvió a sentir como le 'hierve la sangre roja', frase que hizo famosa para referirse a su estado emocional en las previas de las grandes citas cuando estaba al frente del equipo.

El club le otorgó el galardón en marzo de 2020, días antes del confinamiento por la pandemia, por lo que su entrega se ha retrasado, por motivos de agenda, hasta que ha podido organizarse este martes, en el que Caparrós, de 68 años, ha pasado a ser el segundo en recibirlo tras Manolo Cardo, quien inauguró esta serie y estuvo presente en el acto.

El Banquillo de Oro sevillista lleva el nombre de Ramón Encinas (Pontevedra, 1893-Madrid, 1967). Fue entrenador del equipo en varias etapas y, entre otros logros, ganó en la temporada 1945-46 el único título de Liga que tiene el club.

Caparrós es el técnico sevillista con más partidos oficiales dirigidos (241) y más victorias (111), de ellos 167 y 68 triunfos en Primera, algunos datos por los que este martes el antepalco del Ramón Sánchez-Pizjuán se quedó pequeño por la presencia de numerosos jugadores del Sevilla de distintas etapas, además del técnico uruguayo Diego Alonso, Ivan Rakitic y los canteranos Jesús Navas y Sergio Ramos en representación de la actual plantilla.

También estuvieron representantes de la Asociación de Entrenadores de Fútbol y de equipos por los que ha pasado como Deportivo de La Coruña, Villarreal y, especialmente, Athletic Club de Bilbao con su presidente, Jon Uriarte, al frente y el mítico exguardameta José Ángel Iribar, quien le entregó una insignia como 'embajador' del club vizcaíno.

"Te convertiste en uno de los nuestros y en San Mamés nunca te vamos a olvidar", aseveró Uriarte en un acto en el que se proyectaron vídeos con mensajes de cariño hacia la trayectoria y personalidad del técnico utrerano, entre ellos de los futbolistas del Athletic Iker Muniain y Óscar de Marcos, el exseleccionador nacional Vicente del Bosque o Pablo Alfaro, al que tuvo a sus órdenes en el Sevilla junto con Javi Navarro, quien sí pudo desplazarse desde Valencia hasta Sevilla.

Con el de Utrera debutaron en Primera dos de los sevillistas campeones del mundo, quienes le agradecieron todo lo que había hecho por ellos y por los canteranos. Jesús Navas, que este martes cumplía 38 años, dijo que no había podido recibir "un mejor regalo" que "estar junto a Caparrós" en este acto, mientras que Sergio Ramos expresó su cariño al que considera su "padre deportivo" y del que afirmó: "si hoy tuviera que quedarme con un entrenador (de su carrera), sería con usted".

El presidente del Sevilla, José Castro, lo catalogó como "un entrenador de 5 estrellas", un "embajador del Sevilla" y afirmó sobre el galardón otorgado por el club: "nadie más que tú se lo merece".

Caparrós cerró el acto, visiblemente emocionado, e hizo multitud de referencias a sus recuerdos y agradecimientos a muchas personas vinculadas a su carrera, entre ellos con una mención especial a su padre, Antonio Caparrós Infante, que fue el que, según resaltó, le metió "la sangre roja" y el sentimiento sevillista en sus venas.

Muy agradecido por este 'II Banquillo de Oro' del Sevilla, rememoró a su "queridísimo" Roberto Alés, el presidente que lo contrató en su primera etapa, y a los otros dos con los que trabajó, José María del Nido Benavente, y al actual, José Castro, además de a los fallecidos Antonio Puerta y José Antonio Reyes, futbolistas que también debutaron con él.

"El día más duro (en su primera etapa) fue el de mi adiós", reconoció Caparrós, quien, además de aludir a la gran rivalidad con el Betis, acabó su emotiva intervención con la siguiente frase: "En Sevilla hay que mamar. ¡Viva el Sevilla!".

El homenajeado dirigió al primer equipo en tres etapas, la primera entre el verano de 2000 -con el equipo en Segunda- hasta junio de 2005, cuando dejó al equipo asentado en Primera y logrando una segunda clasificación europea seguida.

Trece años después, tras su paso por Deportivo, Athletic Club, Mallorca, Levante, Granada y Osasuna, con experiencias en el Neuchatel suizo y el Al Ahli de Catar, volvió en abril de 2018 tras la salida del italiano Vincenzo Montella y con el objetivo de lograr plaza europea, algo que consiguió con una jornada de antelación.

Ese verano asumió el cargo de director de Fútbol del Sevilla FC, aunque al cierre de la 2018/19 volvió al banquillo tras la salida de Pablo Machín y, tras once partidos, consiguió repetir clasificación europea.

En abril de esa campaña, al final del partido que su equipo ganó en Valladolid (0-2), anunció en la sala de prensa del Nuevo José Zorrilla que padecía una leucemia, pero que no necesitaba tratamiento ni le impedía seguir con su trabajo.

Entre el verano de 2019 y marzo de 2020 fue director de Desarrollo del Talento en el Sevilla, cargo que dejó para ser seleccionador nacional de Armenia -hasta septiembre de 2022-.

Caparrós es el sexto entrenador con más partidos en la historia de Primera (510), sólo superado por Luis Aragonés, Javier Irureta, Miguel Muñoz, Víctor Fernández y Javier Clemente.