Christensen y Rüdiger, viejos aliados con caminos opuestos

Del ‘silencio’ del danés a la entrega del alemán: los dos exjugadores del Chelsea están brillando después de su ‘divorcio’

Los defensas se han ganado de maneras muy diferentes la confianza de Xavi Hernández y Carlo Ancelotti

FC Barcelona - Manchester United | La ocasión de Christensen

El palo evitó el gol de Christensen ante el Manchester United en el Camp Nou / TELEFÓNICA

Jordi Carné

Jordi Carné

Andreas Christensen y Antonio Rüdiger fueron dos piezas fundamentales en el Chelsea que se proclamó campeón de Europa la temporada 2020/21. El danés y el alemán compartieron el eje de la zaga con Thiago Silva y blindaron la portería de Edouard Mendy para catapultar al club inglés hacia la segunda Champions League de su historia. En la vida y en el deporte, sin embargo, todo lo bueno se acaba.

Ambos futbolistas no renovaron sus contratos con el equipo ‘blue’ y, el pasado verano, se marcharon de Stamford Bridge con la carta de libertad… para aterrizar a los dos ‘gigantes’ del fútbol español, FC Barcelona y Real Madrid. De compenetrarse a la perfección a separar sus caminos de la forma más drástica que, muy probablemente, existe. Es la historia de un divorcio que acabó con cada jugador en uno de los dos bandos que protagonizan una de las rivalidades más importantes del mundo.

Andreas Christensen y Antonio Rüdiger jugaron cinco temporadas juntos en el Chelsea

Andreas Christensen y Antonio Rüdiger jugaron cinco temporadas juntos en el Chelsea / SPORT

En Londres, Christensen y Rüdiger levantaron la Champions mencionada (2020/21), una Supercopa de Europa (2021/22), un Mundial de Clubes (2021/22), una Europa League (2018/19) y una FA Cup (2017/18). Compartieron terreno de juego en 94 compromisos con un bagaje de 59 victorias, 17 empates y 18 derrotas. Los registros del danés en esos partidos fueron de una diana y una asistencia; los del alemán, de seis tantos y cinco servicios de gol. Estas cifras manifiestan, más allá de la incuestionable superioridad del teutón en área contraria, que el futbolista de Lillerød siempre ha sido mucho más efectivo que ‘ruidoso’ en el terreno de las estadísticas.

Caracteres opuestos

Cada jugador tiene su forma particular de ganarse la confianza de un nuevo entrenador. Mientras que Andreas se ha ganado a Xavi Hernández y el barcelonismo desde la sobriedad, con actuaciones prácticamente mudas, pero categóricas, Antonio ha hecho lo propio con Carlo Ancelotti y los aficionados merengues gracias a su personalidad enérgica y carismática.

Ambos son imprescindibles para sus técnicos: el primero se ha consagrado al lado de Ronald Araujo y ha ‘desplazado’ a Jules Kounde al lateral derecho y el segundo ha aprovechado los problemas físicos de David Alaba y Ferland Mendy para ser ‘vital’ junto con Éder Militao. Llegaron para reforzar los fondos de armario de Barça y Madrid, respectivamente, y no han negociado su protagonismo principal en los onces de gala de culés y merengues. Es lo que tienen los futbolistas campeones y ambiciosos.

En el equipo blanco, solo Vinicius, Fede Valverde y Courtois superan en minutos a un Rüdiger (2.635’) que solo se ha perdido dos envites por lesión (por molestias en la cadera) y que se ha llegado a partir la cara, literalmente, por el nuevo escudo que defiende: rescató un empate milagroso en la fase de grupos de la Champions, concretamente en la visita al Shakhtar Donetsk, en una jugada en la que se jugó el físico para marcar. 20 puntos de sutura en la frente a cambio de uno en la liguilla de la Liga de Campeones. No podría haber mayor demostración de compromiso y entrega.

Shakhtar - Real Madrid | El gol de Rudiger y su duro golpe en la cara

El gol de Rudiger al Shakhtar en el minuto 95 supuso el 1-1 y le trajo consigo un durísimo golpe en la cara / TELEFÓNICA

Los números de participación de Christensen, por su parte, son algo inferiores (1.654’). En primer lugar, porque necesitó varias semanas para imponerse a Eric Garcia y Gerard Piqué en el inicio de la temporada; también porque, antes del Mundial, sufrió un esguince de tobillo que le mantuvo un mes en la enfermería. Desde principios de noviembre, no obstante, ha sido titular en la mayoría de encuentros y solo se ha quedado sin jugar frente a Intercity y Girona por descanso y en el clásico copero del Bernabéu por molestias en el tobillo.

Primeros títulos

Aunque el fútbol va muy rápido y examina diariamente a todos los que forman parte de él, en estos momentos nadie puede poner en duda que Christensen y Rüdiger acertaron a la hora de cambiar de aires e irse de un Chelsea que, actualmente, ocupa la décima posición de la tabla de la Premier League pese a la elevada inversión realizada tanto en verano como en invierno. También es incontestable que las direcciones deportivas del Barça y el Madrid pueden estar muy contentas con en el perfil que encontraron para mejorar el nivel competitivo de sus retaguardias. Y eso que la azulgrana tanteó al alemán y lo descartó muy rápidamente por sus pretensiones económicas desorbitadas.

En el Camp Nou y el Santiago Bernabéu, los excentrales ‘blues’ están brillando. Casi todos los analistas se imaginaban que Andreas y Antonio ostentarían un rol mucho más secundario en la trilogía de clásicos que empezó el 2 de marzo y finalizará el próximo 5 de abril. De momento, sin embargo, ya han ayudado a sus nuevos equipos a levantar títulos. Uno ha celebrado una Supercopa de España; el otro ha ganado la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes. La Liga y la Copa dictarán sentencia en el primer año de enfrentamiento de los dos viejos amigos.

Andreas manda en los duelos directos

Aunque Barça y Real Madrid ya se han enfrentado tres veces esta temporada, Christensen y Rüdiger solo han coincidido en un clásico, el correspondiente a la final de la Supercopa de España, porque el danés se ha perdido los otros dos por lesión. El resultado fue favorable a los intereses azulgranas (1-3 y primer título de la era Xavi). No es la única vez que los exjugadores del Chelsea han compartido terreno de juego en distintos bandos: el 6 de marzo de 2017, un mes antes de que sus caminos se encontraran en Stamford Bridge, participaron en un amistoso entre Dinamarca y Alemania que finalizó en empate (1-1).