Recuperar a Demir, la solución de Xavi a la plaga de lesiones en ataque

Aunque la dirección deportiva del FC Barcelona intentará acometer varios fichajes durante el mercado de invierno, es evidente que una de las principales misiones a corto plazo de Xavi Hernández en el banquillo del Camp Nou será la de obtener el máximo rendimiento de los jugadores que ya tiene en el equipo. El técnico blaugrana explicó en la rueda de prensa de su presentación que, desde su punto de vista, la plantilla culé tiene suficiente calidad como para mejorar su situación en la Liga Santander y la Champions League.

Xavi tiene claro que hay jugadores que tienen que dar un paso hacia delante. En tiempos complicados, de austeridad, es muy importante que los futbolistas no culpen al contexto para justificar su baja aportación, sino que se rebelen contra el mismo e intenten cambiar las cosas. Uno de los primeros nombres que viene a la cabeza cuando se analiza esta cuestión es Yusuf Demir. El austriaco convenció a Ronald Koeman y a la afición azulgrana durante la pretemporada, pero a medida que ha ido avanzando el curso su protagonismo y sus minutos se han ido diluyendo.

Cuando finalizó el verano, prácticamente nadie en los despachos del club dudaba de que, al finalizar la presente campaña, se ejecutaría la opción de compra de 10 millones de euros que incluye el contrato de cesión del extremo. En las últimas semanas, sin embargo, desde la entidad catalana ya se han transmitido dudas. El motivo tiene que ver con la 'desaparición' futbolística de Demir. Desde principios de octubre, el joven atacante de 18 años solo ha jugado media hora, los 30 minutos que Koeman le concedió en Vallecas en el que acabó siendo el último compromiso del héroe de Wembley como técnico del Barça. Ese día intervino 15 veces, realizó diez pases con un 80% de acierto, no gano ninguno de los duelos que disputó y perdió cuatro balones.

Más allá de las discretas cifras, Yusuf estuvo lejos de recordar al jugador que ilusionó al barcelonismo con el crecimiento que experimentó desde que llegó al Barça, el mismo que le permitió 'saltarse' el filial aunque realmente venía para foguearse allí. El austriaco no aprovechó la segunda oportunidad y Sergi Barjuan no contó con él en los tres partidos que dirigió en su breve etapa interina al frente del primer equipo, ante Alavés, Dinamo de Kiev y Celta. Abde le ganó la partida y el '11' no gozó de la continuidad con la que sí que contó cuando debutó oficialmente en San Mamés, en la segunda jornada de Liga.

Y es que, después unos buenos y atrevidos 28 minutos en La Catedral, Koeman le hizo jugar contra el Bayern de Múnich en Champions y ser titular en los partidos de Liga frente a Granada y Cádiz. En el Nuevo Mirandilla se acabó todo: fue sustituido en el descanso y hasta el duelo contra el Rayo solo participó en los instantes residuales del holgado triunfo culé ante el Levante en el Camp Nou. El desparpajo y la confianza se fueron disolviendo paulatinamente para dar paso a la indolencia. A la apatía.

Nueva etapa

Los mejores jugadores del mundo son los capaces de convertir los problemas en oportunidades. Para el derbi contra el Espanyol, Xavi Hernández no tendrá más delanteros disponibles que Memphis Depay, Luuk de Jong y Demir. Con Ousmane Dembélé y Ansu Fati en la enfermería, el míster solo tiene a Yusuf como extremo... y en el sistema y modelo de juego que quiere implantar esa posición es imprescindible. Vital. Con el egarense, toda la plantilla volverá a partir desde cero. El joven austriaco, ahora convocado con la selección de su país, tendrá una nueva oportunidad para demostrar su calidad. El papel y los consejos del flamante entrenador blaugrana serán importantísimos, pero lo que realmente determinará el potencial del futbolista será su actitud y sus ganas de triunfar en la Ciudad Condal.