Rossi: ahora sí estrecha la mano de Márquez

Rossi le da la mano a Márquez tras la carrera de Argentina

Rossi le da la mano a Márquez tras la carrera de Argentina / sport

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En septiembre del año pasado, en el circuito de Misano, Marc Márquez quiso hacer un gesto conciliador con Valentino Rossi en público y le tendió su mano a 'il dottore' en la rueda de prensa. El italiano se la negó. Una vuelta más de tuerca en su estropeada relación. Este domingo, después de que el de Cervera ofreciese un recital en Argentina, Rossi no dudó en estrechar su mano, felicitándole por una victoria incontestable, con el patrón de Dorna Carmelo Ezpeleta como testigo de excepción.

Una imagen muy esperada y más en este escenario, ya que fue en el circuito de Termas de Río Hondo cuando comenzaron las diferencias entre dos reyes de MotoGP. En aquel Gran Premio de Argentina ambos pelearon por la victoria y al final Márquez se fue al suelo al cerrarle Valentino. La tensión alcanzó sus cotas más altas ese mismo año en Sepang, cuando Marc volvió a caer por una infracción del italiano. La sanción acarró a Rossi un último puesto en la parrilla de Valencia y el de Tavullia acabó perdiendo el que hubiese sido su décimo título. "Nunca se lo perdonaré a Marc", sentenció.

Con el tiempo las aguas volvieron a su cauce y aunque la relación quedó tocada, ambos se respetaban en pista y mantenían las distancias fuera de ella. Pero, de nuevo en Argentina, en 2018, la rivalidad se multiplicó por mil. Márquez, desatado en una remontada para ganar posiciones después de su error de salida, acabó llevándose por delanye a Rossi. Y éste lanzó su 'artillería' pesada contra el español, acusándole de "poner en peligro" la integridad de los demás pilotos.

De ahí que, el gesto divulgado ahora por Dorna a través de su cuenta de Twitter, acompañado de las palabras "respeto mutuo", cobre un significado muy importante. Los organizadores del Mundial saben que la rivalidad de Márquez y Rossi 'vende' y hace subir las audiencias, pero huyen de polémicas en un deporte en el que los pilotos se juegan la vida. Mejor así.