Los Barcelona Dragons caen 15-39 ante unos superiores Munich Ravens

Se enfrentaban Barcelona Dragons y Munich Ravens en el Estadi Olímpic de Terrassa para disputar la cuarta semana de competición en la European Football League, un partido en que los catalanes perdieron 9-36 y poco pudieron hacer ante el buen partido del conjunto alemán.

MUNICH RAVENS IMPONE SU TONO FÍSICO

Los Dragons no tardaron en demostrar sus capacidades en el juego de pase. Ya en el drive inicial de partido Connor Miller llevó al equipo a pocas yardas de la endzone con un enorme lanzamiento de 46 yardas a Jordi Torrededia y, pese a no poder rematar la faena, Victor Albarracín sumó los primeros puntos en el marcador vía patada (3-0).

Los primeros snaps ofensivos de Ravens fueron también poderosos: Markell Castle desde el Wide Receiver hizo sufrir la defensa local en el primer cuarto, uno de los mejores receptores en este inicio de competición, pero los alemanes tampoco lograron sumar touchdown. Field Goal y tablas, 3-3 en el ecuador del primer periodo.

Todo parecía tranquilo hasta que llegó Tomiwa Oyewo, runningback que eludió a la línea ofensiva rival a su placer y corrió para 72 yardas sumando el primer touchdown del encuentro. 3-10 para Ravens y la sensación de superioridad física estaba en el aire. Una intercepción a Miller dentro las diez primeras yardas de Dragons confirmó los malos presagios, y es que los de Munich estaban ejecutando su gameplan a la perfección.

Un sack de Darius Slade, defensive end de Barcelona, y otro de Brugnani, cornerback, hicieron retroceder el ataque de Ravens de tal manera que fallaron su chute entre los tres palos, una buena notícia para la ofensiva de Dragons que parecía ciertamente noqueada de los últimos embites y tenía ahora la oportunidad de resurgir.

La realidad es que fue todo lo contrario. A falta de seis minutos en el marcador, un mal snap del ataque de Dragons provocó un fumble en su propia zona de anotación y el resultado fue fatal. Johannes Zirngibl, jugador de Ravens ,recuperó el balón y sumó touchdown, 3-16 para los visitantes.

La primera parte del choque terminó tal y como empezó, con el cuadro visitante controlando la parcela defensiva e imponeniendo la fisicalidad de sus hombres en la ofensiva.

SEGUNDA PARTE, LA MISMA TÓNICA

No podían arrancar peor los segundos treinta minutos. Jeffries, quarterback de Ravens, conectó un pase con Oyewo que corrió para 60 yardas hasta la zona de anotación, abusando de la secundaria de Dragons que tan solo podía mirar ante el despliegue físico de su rival. 3-22 para la franquicia de Munich.

Los Dragons no conseguían descrifrar la defensa alemana y estaban sufriendo en su línea ofensiva, unidad que no daba ni tiempo para lanzar ni espacio para correr. El resultado fue el de siempre: balón a las manos de Oyewo, corredor que campaba a sus anchas y anotaba su tercer touchdown de la tarde. El marcador ahora si reflejaba un 3-30 al que ya era prácticamente imposible darle la vuelta, a pesar de estar en la mitad del tercer cuarto.

Eduard Molina se encargó de recortar distancias con un touchdown de carrera y Dragons sumaba por fin sus primeros seis puntos en el casillero, pero otro field goal errado, la tónica en el partido para los catalanes, frenaba la sensación de éxtasis (9-30).

El último cuarto fue un simple trámite para los bávaros, que sumaron otro touchdown de la mano de Rutsch en una carrera de 8 yardas y mantuvieron a Dragons lejos de su zona de anotación en el lado defensivo. Josh Johnston maquilló la situación con un touchdown, y el partido finalizó con un 15-39 para Ravens.

La semana que viene los Barcelona Dragons visitan el feudo de los Helvetic Guards para afrontar la semana cinco de competición en la ELF, encuentro que arrancará el domingo 2 de julio a las 13:00 horas CET.