Messi, Mateu y la Liga 2013-14

El resultado final de empate a uno proclamó campeón al equipo rojiblanco en la última jornada a costa del Barça de Gerardo Martino, que vio volar un título que ganó y mereció por culpa de un grave error arbitral. Un error que a la entidad le costó la quinta Liga en las seis últimas ediciones. El Barça necesitaba ganar para ser campeón y al Atletico de Diego Simeone el empate le valía para cantar el alirón. Martino no pudo poner al equipo de gala para dar el gran golpe ante 96.973 espectadores por tener varios jugadores con problemas, Xavi y Neymar entre ellos. A los 33 minutos llegó la recompensa al mejor juego azulgrana y Alexis, tras una asistencia de Messi con el pecho, soltó un potente derechazo ante el que nada pudo hacer Courtois. El primer tiempo finalizó con ventaja mínima para un Barça que fue de más a menos.

Tras el intermedio, el Barça fue otro. Pareció que ya no daba más de sí, que se había quedado sin combustible a 45 minutos de la gloria. Avisó el Atlético por mediación de Villa en el primer minuto del segundo tiempo con un disparo al poste derecho de Pinto y, tres después, llegó el gol del empate, obra de de Godín. El central uruguayo hirió al Barça al rematar de cabeza un saque de esquina lanzado por Gabi.

Con el 1-1 tocaba volver a empezar y, aunque con muchas dificultades, el Barça apuró sus opciones para conseguir un gol que le diera la Liga. Lo buscó con más corazón que piernas y cabeza. Y lo encontró. Lo marcó Messi en el minuto 63, pero no subió al marcador. El árbitro, Antonio Miguel Mateu Lahoz, lo anuló. Pitó fuera de juego del argentino cuando éste había sido habilitado por Juanfran, último en tocar el balón (con la pierna izquierda) antes del remate de Leo. Pero Mateu Lahoz interpretó que había sido Cesc, quien sobre el campo le explicó que estaba equivocándose. Pero la decisión fue inapelable.

El error dejó al Barça sin la Liga 2013-14 y esa misma noche el árbitro, como desveló el ayudante de Martino, Elvio Paolorosso en octubre de 2018 en una entrevista al programa ‘Pelota al piso’ del canal ‘TNT Sports’: “Eran las dos de la mañana, estábamos llorando en el vestuario y el árbitro nos pidió perdón. Fue un año complicado”. 

Confesiones

También el propio Mateu Lahoz, en septiembre de 2019, lo reconoció en ‘Radio Marca’: “En mi caso fue imperceptible discernir si el balón había golpeado en Juanfran o en Cesc. Cuando terminó el partido nadie había reparado en eso, a cámara lenta pudimos ver que parece ser que el balón acaba golpeando”, confesó. Y apuntó que “es un ejemplo de jugada en la que ojalá hubiera estado el VAR”.

En cualquier caso, el Barça se quedó sin Liga y cerró una temporada en la que solo pudo ganar la Supercopa de España, precisamente contra el Atlético y por el valor doble de los goles en campo contrario: 1-1 y 0-0. El equipo de Simeone apeó al Barça en cuartos de final de la Champions (1-1 y 1-0) y el Real Madrid lo dejó sin Copa al ganar la final de Mestalla (1-2), también con polémica arbitral a cargo de Mateu Lahoz.

Martino, que tras el gol anulado a Messi se quedó petrificado, con las manos sobre la cabeza, acudió a la sala de prensa para despedirse. En su monólogo pidió “disculpas a la afición al no haber sido capaz de lograr los objetivos fijados” y aseguró estar “muy agradecido al club y a todos aquellos que confiaron en mí para este reto. Lo hemos intentado todo hasta el final con dignidad, pero nos hemos encontrado a un rival mejor que nosotros”.

El Atlético, sin lugar a dudas, firmó una Liga enorme, pero al Barça le privaron de un título que igualmente hubiera merecido. Martino hizo el mejor arranque liguero de la historia (ocho victorias en las primeras ocho jornadas), contribuyó al récord de 59 jornadas en lo más alto (de la jornada 1 a la 21) y bajo su batuta el Barça se mantuvo invicto 20 partidos desde su debut (16 victorias y 4 empates en todas las competiciones).