El recambio de Mbappé ya asusta al FC Barcelona

Victor Osimhen, que apunta a ser el sustituto del francés en el PSG, ha resucitado con un Nápoles que tras golear al Sassuolo (1-6) empieza a preocupar al Barça.

Oshimen anotó un hat trick ante el Sassuolo

Oshimen anotó un hat trick ante el Sassuolo / SERENA CAMPANINI

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Es algo que ocurre generalmente en el mundo del fútbol. Cuando un gran jugador cambia de equipo, los clubes importantes deben ponerse a cubierto, puesto que puede producirse un terremoto en el mercado de fichajes. Y esto es algo que parece que va producirse con la salida de Kylian Mbappé del Paris Saint Germain (PSG).

El club francés ha asumido que su estrella se va a marchar este verano (al Real Madrid si nada cambia) y ya está trabajando para encontrar un sustituto o sustitutos para cubrir la baja del para casi todo el mundo, mejor futbolista del planeta. Rafael Leao del AC Milan o Marcus Rashford del United son algunos de los nombres que podrían relevarle, pero en las últimas fechas está cobrando fuerzas la opción del delantero del Nápoles Victor Osimhen, tal y como apuntan las informaciones que llegan desde Italia y como auguran los pronósticos deportivos de Betfair que dan una probabilidad implícita del 34,77% de que el nigeriano fiche por el PSG antes del 1 de septiembre, por un 22,22% si lo hace por el Chelsea o un 18,18% si se acaba convirtiendo en futbolista del Arsenal.

Resucitado ante el Barça

Tras haberse consolidado en los últimos años como un delantero Top, y haber ganado el ‘Scudetto’ la pasada campaña con el Nápoles, Victor Oshimen se encontraba esta temporada hasta el partido de ida de ‘Champions’ ante el Barça, en uno de los peores momentos de su carrera deportiva. Y no eran pocos los motivos. Una larguísima negociación para renovar su contrato (con una asumible cláusula de 130 millones) tras haber estado sopesando varias ofertas de Arabía Saudí, una lesión muscular que le dejó un mes fuera de combate, una polémica con su propio club en una red social, rumores sobre una posible mala relación con la otra estrella del equipo, Khvicha Kvaratskhelia, y para colmo, la derrota en la final de la Copa de África ante Costa de Marfil, en un campeonato en el que el delantero no pudo brillar demasiado a causa de constantes problemas físicos.

Pero fue volver de Costa de Marfil y enfrentarse al Barcelona y todo cambió. El delantero fue de la partida en el choque entre napolitanos y culés, y a pesar de verse sometido, al igual que el resto de sus compañeros por los de Xavi Hernández durante casi todo el partido, fue capaz de recibir un balón dentro del área, y hacer un espectacular reverso ante Iñigo Martínez para hacer al tanto del empate e igualar un choque que anteriormente había desnivelado Robert Lewandowski.

Punto de inflexión

Desde entonces Victor Osimhen es otro. El nigeriano se ha liberado al romper su sequía goleadora, además en un partido importante en la Liga de Campeones ante el Barça, y es algo que ha quedado especialmente patente viendo su último encuentro en la Liga italiana ante el Sassuolo. En este choque, el Nápoles fue capaz de golear a este conjunto a domicilio por 1-6 y tres de los tantos fueron obra de Osimhen. El delantero logró anotar un doblete en cuestión de 10 minutos y en el segundo tiempo redondearía su partido para acabar consiguiendo un ‘hattrick’ confirmando que su mejor versión ya está aquí, después de un convulso inicio de temporada y justo antes de disputar el partido de vuelta ante el Barça.

Eliminatoria abierta

El 1-1 de la ida hace que el pase a cuartos del Barça no sea algo fácil de pronosticar, ni mucho menos. La eliminatoria está muy abierta y todo puede ocurrir en Montjuic. El Barça deberá hacer muy bien los deberes y demostrar la mejoría que está ofreciendo en los últimos encuentros ante un Nápoles que también ha crecido con su nuevo entrenador, Francesco Calzona, ya que no solo se ha enchufado Osimhen, sino que también el georgiano Khvicha Kvaratskhelia está ofreciendo mejores prestaciones.

El mundo de fútbol estará muy pendiente de lo que suceda el próximo 12 de marzo en la ciudad condal, y muy especialmente el PSG, que centrará toda su atención en el delantero nigeriano. Su cotización para jugar en París la próxima temporada puede subir o bajar en función de lo que pueda demostrar sobre el terreno de juego. Y 130 millones, no son nada para el dueño del club.