Historia SPORT

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Ricardinho, el mayor futbolista ciego de todos los tiempos

El ‘Pelé ciego’ ya ganó cuatro oros paralímpicos y tiene un estilo de juego muy semejante al de Leo Messi

A los 32 años, el '10' de la Seleçao de Fútbol-5 ya se ha marcado el reto de estar en los Juegos de París en 2024

Ricardinho en acción contra Argentina en la última final paralímpica en Tokio

Ricardinho en acción contra Argentina en la última final paralímpica en Tokio

Joaquim Piera

Joaquim Piera

Cuando empezó con el fútbol-5, en varias ocasiones, el árbitro de turno paraba el partido, incrédulo que aquel futbolista de driblings espectaculares fuera ciego total. Le cuestionaban si veía algo bajo el antifaz reglamentario y los ojos vendados para controlar, de aquella manera, el balón sonoro. Y Ricardinho Alves interpretaba aquellas interrupciones como un elogio.

Ahora con 32 años, ya nadie pone en duda lo que realiza este jugador gaucho de 32 años, torcedor del Internacional de Porto Alegre, que destaca por su depurada técnica, su habilidad y su mentalidad competitiva. Su currículum imponente: cuatro oros paralímpicos seguidos (Pekín 2008, Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020), tres Mundiales y ya fue elegido entres ocasiones el mejor del planeta.

Es un genio, que conforma el Olimpo futbolístico brasileño con O Rei Pelé, Marta (nombrada seis veces la mejor jugadora del mundo por la FIFA) y Falcao (el del futsal). A Ricardinho, capitán de la Seleçao de fútbol-5, se le considera el mayor futbolista invidente que jamás hubo.

El Pelé ciego, como ya fue bautizado, tiene una forma de jugar que recuerda y mucho a la de Leo Messi. “Es un jugador que admiro muchísimo: por su fútbol, por ser un deportista extraordinario y por su postura fuera del campo, ya que es un tipo ejemplar y un gran profesional”, asegura a SPORT.  “Sí, mi conducción del balón es parecida a la de Messi. Si este ya es un estilo de juego que no es fácil de hacer para quien ve, en el fútbol-5 es un reto aún mucho más difícil”, añade el ‘10’ brasileño.

Ricardinho es un futbolista que impresiona por su dominio técnico

Ricardinho es un futbolista que impresiona por su dominio técnico / Rogerio Capela

La habilidad de Ricardinho se encuadra en la escuela clásica brasileña. “Es un don de Dios, pero que como todos los dones necesita ser desarrollado y trabajado”, afirma. En su caso, es el resultado de la persistencia: “cuando era adolescente, soñaba en ser futbolista profesional, pasé muchísimas horas entrenando driblings solo en casa con el balón, descubriendo mi manera de jugar y así fui desarrollando mi estilo”. Es la “repetición de movimientos”, lo que le dio “una intimidad con el balón” que acabaría convirtiéndose “en mi gran diferencial”.

UNA DEDICACIÓN EJEMPLAR

El suyo es el ejemplo del crack de cracks que potenció el talento innato con la vida absolutamente reglada que debe exigirse a cualquier deportista profesional. “Me gusta ser muy disciplinado y metódico, entreno mucho”, asegura. Son dobles sesiones preparatorias seis días por semana, con trabajos técnicos con el balón, de fuerza en el gimnasio, entrenamientos funcionales y hasta Pilates.

“Desde muy joven aprendí que hay varios aspectos que favorecen el rendimiento del deportista como el entrenamiento, el descanso y una buena alimentación, que en mi caso cuido mucho”, cuenta

Es la combinación perfecta que le ha permitido mantenerse en la cima. Lleva 17 años en la selección brasileña y quiere estar en París 2024. Ricardinho Alves es la historia de quien dribló el destino: el niño que quería ser futbolista pero que con 5 años tuvo un desprendimiento de retina y dos años después, a pesar de cinco operaciones, perdió la vista... y aún así, luchó con ahínco para seguir asociado a un balón.