El secreto del campo español: Un 'superalimento' con vitaminas, sin calorías y poder antioxidante

Descubre el fascinante mundo de las plantas comestibles y prepárate para sorprenderte con la diversidad de especies sorprendentes que alberga. Entre ellas se encuentran las tagarninas, también conocidas como cardo común, cardillo o cardo de olla. Su peculiar apariencia destaca por su altura, que puede alcanzar hasta los 80 centímetros, y por sus espinas características.

Además de su presencia imponente, las tagarninas poseen propiedades nutricionales destacables. Son una excelente fuente de vitaminas esenciales para nuestro organismo, como las vitaminas A, B y C, que desempeñan funciones esenciales en nuestro cuerpo.

A pesar de su valor nutricional, son bajas en calorías, con tan solo 27 kcal por cada 100 gramos. Esto las convierte en una opción ideal para aquellos que buscan seguir una dieta hipocalórica o controlar su peso.

Pero las tagarninas no solo son beneficiosas para nuestra salud, también son un elemento culinario tradicional en la cocina rural de nuestro país. Durante la posguerra, cuando la escasez de alimentos era una realidad en España, estas plantas se convirtieron en un alimento básico y accesible para aquellos que sabían cómo encontrarlas en los campos abiertos. Aunque hoy en día la mayoría de los consumidores desconocen su existencia, todavía se pueden encontrar en los puestos de verduras.

Existen diversas formas de cocinar las tagarninas: desde cocerlas y utilizarlas en un sabroso revuelto con ajos y gambas, hasta combinarlas con pan frito, ajo, pimentón, ñoras y comino en las famosas tagarninas esparragás.

Sin olvidar el emblemático potaje de tagarninas, preparado con verduras, habichuelas, garbanzos, ajos, pimentón y aceite de oliva. No pierdas la oportunidad de probar este tesoro culinario, con su sabor único y sus beneficios nutricionales.