De Maleventum a la Serie A

El Benevento se convrtió este jueves en nuevo equipo de la Serie A italiana, después de vencer al Carpi en la final del Play-off de ascenso y protagonizando una historia que no siendo novedad en el Calcio sigue sorprendiendo.

Fundado en 1929 y refundado en tres ocasiones distintas (la última en 2005), el equipo giallo-rosso de la Campania debutará en la máxima categoria del fútbol italiano tras jugar solamente una temporada en la Serie B (después de permancer durante ocho años en la tercera categoría) en la que se convirtió en la gran revelación del campeonato.

Tal como hicieran el Carpi y el Frosinone en 2015, el Sassuolo en 2013, el Novara en 2011 o el Siena en 2003, el ascenso del Benevento significó una absoluta sorpresa, que se suma a la protagonizada por el SPAL, campeón de la Serie B y que subió directamente (junto al Verona) por primera vez en 49 años.

De esta manera, la rebelión de los modestos sigue haciéndose presente en el fútbol italiano y desafiando tanto a la lógica como a la prepotencia, personalizada en Claudio Lotito, presidente de la Lazio y que en 2015 aseveró que el ascenso (que acabaría siendo cierto) de Carpi y Frosinone serían "una mierda para el Calcio".

El club de la Campania es la última rebelión histórica del Calcio

Con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, su héroe definitivo fue el rumano George Puscas, delantero de 21 años cedido por el Inter y autor tanto del gol con el que su equipo eliminó al Perugia en la semifinal del play-off como del que sirvió este jueves para vencer al Carpi y consumar el ascenso definitivo.

Benevento, la capital de la Campania, es una pequeña ciudad de 60.000 habitantes situada a 70 kilómetros al noreste de Nápoles y con un rico patrimonio histórico, en el que destaca el Arco del Triunfo (dedicado a Trajano) considerado como uno de los mejores de la época romana.

La curiosidad de Benevento es que su nombre original era Maleventum, debido a que era un territorio 'de mal viento' y que por su posición geográfica fue sede de muchas batallas históricas en la antiguedad. La que se libró en el año 275 AC provocó la derrota de Pirro de Epiro contra las legiones romanas y motivó que se cambiase 'Mal' por 'Ben', pasándose a llamar la ciudad Beneventum, en señal de buen evento. En la Edad Media, ya tras la caída del Imperio Romano, tomó su nombre actual.