La salvación del Barcelona B es casi una quimera

En el mundo del fútbol puede pasar de todo y la historia está llena de ejemplos, pero ya a nadie se le escapa que la salvación del Barça B se ha convertido prácticamente una quimera. La combinación de resultados de la jornada no podía ser peor para los intereses azulgranas. A la sexta derrota consecutiva del equipo, el sábado en Almería (1-0), hay que sumar la victoria este domingo de la Cultural Leonesa Sobre el Córdoba (2-1), el peor reultado posible para las expectativas de los chicos de García Pimienta. Y es que ahora la salvación está a cinco puntos... y solo quedan 15 por jugar.

El triunfo de la ‘Cultu’ fue lo más negativo que podía pasar porque el Barça B tiene el ‘goal average’ perdido con los leoneses, que quedan ya a seis puntos y superan a Alcorcón y Almería. Estos últimos son ahora los que marcan la frontera con el descenso, a cinco puntos y también la diferencia de goles a favor con un filial azulgrana que deseaba un empate entre Cultural y Córdoba para que no se distanciaran. En último caso, un triunfo de los blanquiaverdes hubiera supuesto un mal menor, al tener el Barça B, en este caso sí, el ‘goal average’ a favor.

un precedente al que aferrarse

Nada de eso ocurrió y ahora el panorama es desolador. Prácticamente obliga a los de ‘Pimi’ a ganarlo todo. La última bala la tendrán el sábado (18.00h) en el derbi del Mini Estadi ante el Reus. Los rojinegros se salvarán matemáticamente si ganan y antes ha perdido el Córdoba en su feudo ante el Huesca...

Y el filial azulgrana solo puede contemplar una victoria. O acabará todo. Ganar, romper la dinámica y volver a ganar a Sporting, Cádiz, Albacete y Zaragoza. Ahí es nada.

Como mínimo, hay un precedente al que aferrarse. En el mes de enero, tras caer en el Mini Estadi ante el Valladolid y vencer el Nàstic en Pamplona, la salvación quedó, como ahora, a cinco puntos. Los entonces entrenados por Gerard López reaccionaron con tres victorias seguidas –Tenerife, Granada y Córboba– y salieron del pozo. ¿Se repetirá la historia?