Eneko: Por toda la escuadra

Jugó en el Barça B con leyendas como Sergio Busquets bajo las órdenes de Pep Guardiola

Cambió las botas por espátulas, traspos de cocina y fogones

07 JUL 2023 8:00

Cuando entrenaba junto a los chavales del Barça B, con Guardiola al mando, poco imaginaba que el día que colgara las botas las iba a cambiar por espátulas, trapos de cocina y fogones. En aquellos tiempos, Eneko era uno de los veteranos de la ‘tropa de Pep’ y compartía vestuario con el que después fue un campeón del mundo, Sergio Busquets.

Aquella etapa futbolística le sirvió “para saber lo que es la disciplina, el esfuerzo, el saber perder y también ganar. Aprendes que nada es para siempre, que la carrera deportiva es finita y que debes trabajar por y para tu futuro”.

Explica que “era un extremo izquierdo a la antigua usanza, de mucho recorrido y de buen centro en carrera. Me retiré con treinta y un años bastante ‘tocado’ por las lesiones. Viví esa etapa con pasión. Lo que vives en un vestuario es toda una escuela y el tiempo que compartí con Guardiola me dio la vuelta. Aprendí muchísimo. El fútbol cambió, en parte, por muchas de las cosas que él hizo. Por ejemplo, hasta entonces los porteros sacaban de volea. Mira lo que hacen ahora, nada que ver. Se acabó el ‘patadón’ y se construye desde atrás. Pep es inspirador y arrollador”.

Los recuerdos dejan paso a un presente absolutamente enriquecedor. Sabe muy bien, huele a triunfo y se nota que Eneko lo ha cocinado a fuego lento. Nadie le ha regalado nada. Como ganador de MasterChef ha conseguido la fama que no le dio el balón pero que “es fruto de años de trabajo. Soy el típico amigo ‘cocinillas’ del grupo al que todos animan a presentarse a este programa. Mis hijas son mis mejores ‘pinches’ y mi mujer, la mejor compañera de equipo posible”. A ella le dedicó uno de los postres de la semifinal con un “gràcies, carinyo” en catalán que emocionó a la audiencia.

Vive en Terrassa y su futuro más inmediato pasa “por un sueño: Estaré un mes en el restaurante Abac de Jordi Cruz. ¡Imagínate!”. Lo imagino. Aprender y compartir con genios como él o como Guardiola es un privilegio que Eneko sabe, mejor que nadie, lo que supone.

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