Lyles resucitó el espíritu de Carl Lewis y... dos finalistas en longitud

Especialista en 200 metros, el estadounidense reinó por primera vez en los 100 metros saliendo fatal

España sacó un doble botín en la final de longitud (Diamé fue sexta con 6,82 y Ebosele, octava con 6,62)

Noah Lyles lo celebró por todo lo alto... pero ya quiere más

Noah Lyles lo celebró por todo lo alto... pero ya quiere más / WORLD ATHLETICS

David Rubio

Carl Lewis ha pasado a los anales del atletismo como uno de los velocistas más extraordinarios de la historia pese a que sus problemas en la salida complicaron siempre sus victorias en el hectómetro pese a que siempre se centró más en esa prueba.

Dotado de la capacidad de aceleración más 'bestia' del atletismo en los últimos 30 metros, el 'Hijo del Viento' amasó un sensacional palmarés en ambas pruebas, con un 'doblete olímpico en los Juegos de Los Ángeles'84 que se le escapó en Seúl'88 porque su compatriota Joe DeLoach lo superó en una final antológica (19.75 por 19.79).

En los Mundiales conquistó tres oros en 100 metros y solo un bronce en 200 allá por 1993 en Stuttgart, cita en la que alzaron sendos títulos en marcha Chuso García Bragado y Valentí Massana. Carl Lewis siempre era de los peores en la salida. Le costa erguirse y cuando parecía que no tenía opciones solía emerger al estilo del mejor Usain Bolt.

Noah Lyles tampoco sale bien y él mismo ha reconocido en varias ocasiones que necesita "mejorar en los primeros 10 metros", si bien sus 180 centímetros se ven menos que los casi 190 de Lewis en su época. Pese a ello, el de Florida ha ido dando pasos adelante en el hectómetro mientras en los 200 lisos suma dos oros seguidos, el segundo de los cuales (Eugene'23) le sirvió para resarcirse del bronce en los Juegos de Tokio. Su marca en el doble hectómetro es sencillamente colosal (19.31, solo tras los 19.19 de Bolt y los 19.26 de Asafa Powell).

La progresión de Lyles en la final fue espectacular

La progresión de Lyles en la final fue espectacular / WORLD ATHLETICS

Pues bien, Lyles se ha encumbrado este domingo en Budapest como nuevo campeón mundial de 100 metros con marca personal (9.83) después de ser el que peor salió de los tres medallistas. El botswano Tebogo (9.88) dio a áfrica su primera medalla mundialista en el hectómetro y el británico Hugues fue bronce con la misma marca, unos 9.88 que dejaron fuera del podio al jamaicano Seville. Lo más difícil ya lo tiene el estadounidense, gran favorito en 200 metros y en el relevo 4x100.

Dos finalistas para España

Unas cuantas horas después del oro matinal de María Pérez en 20 km marcha, la final femenina de salto de longitud propició una doble buena noticia para el atletismo español , que sumó de un plumazo dos plazas de finalista gracias a la octava posición de la joven Tessy Ebosele (6,62) y a la sexta de una Fátima Diamé que igualó su mejor marca personal con 6,82 y que lideró la prueba hasta el último salto de la primera rotación.

Después del escándalo con las mediciones en el último Campeonato de España, la realidad es que en Budapest han participado tres atletas (la catalana María Vicente se quedó fuera de la final por tan solo dos centímetros) y que la valenciana se quedó a solo seis centímetros de un bronce que habría sido histórico. España solo cuenta con el oro en Sevilla'99 y el bronce en Edmonton'01 de la hispanocubana Niurka Montalvo.

Tessy Ebosele y Fátima Diamé, felices y muy satisfechas

Tessy Ebosele y Fátima Diamé, felices y muy satisfechas / RFEA

La victoria fue para la serbia Ivana-Vuleta, quien abrió la final con un nulo tan justo como largo para terminar logrando el mejor salto mundial en lo que va de año con 7,14. Ausente la ya excampeona Malaika Mihambo, la secundaron en el podio la estadounidense Tara Davis (6,91) y una gran competidora, la rumana Alina Rotaru (6,88).

Los demás campeones

El domingo resultó espectacular y Budapest vibró con mayúsculas con la tercera plaza del local Bence Halasz en martillo (80,82), séptima medalla húngara en esta especialidad aunque ninguna de oro. La victoria contra pronóstico fue para el canadiense Katzberg con 81,25 a sus 21 años por delante de un habitual como el polaco Nowicki (81,01).

El joven Ethan Katzberg dio la campanada en el martillo

El joven Ethan Katzberg dio la campanada en el martillo / WORLD ATHLETICS

No menos apasionante resultó la definición del heptatlón, con la británica Katarina Johnson-Thompson jugándose el oro con la estadounidense Anna Hall mientras el marcador reflejaba la puntuación en directo con un National Athletics Centre. Al final se impuso la europea con 6.740 puntos por delante de la favorita americana (6.720 cuando llegaba con 6.988) y de la neerlandesa Anouk Vetter (6.501), quien dejó con la miel en los labios a la húngara Krizsán tras 'meterle' casi 12 segundos en el '8' (6.479).

Por último, el ugandés Joshua Cheptegei agrandó su leyenda con su tercer oro consecutivo en 10.000 metros (27:51.41), fraguado en una última vuelta de ensueño en la que acreditó unos increíbles 53.45. De esta forma, iguala a Mo Farah con tres oros consecutivos y se sitúa a uno de dos mitos como los etíopes Haile Gebrselassie y Kenenisa Bekele. La plata fue para el keniano Ebenyo (27:52.60) y el bronce para Barega (27:52.72).