Son Moix pone fin a la euforia del Athletic

El Athletic se estrelló contra un muro en Son Moix. La avalancha ofensiva desplegada por los bilbaínos ante Osasuna y Betis fue sofocada por un Mallorca que se envalentonó con el paso de los minutos, llegando a acariciar la victoria. A los de Ernesto Valverde se les terminó haciendo largo el partido, pero saldaron su visita a las islas baleares con un valioso punto.

El Mallorca había tomado buena nota de los estragos causados por los hermanos Williams en las jornadas anteriores, y tanto Nico como Iñaki fueron recibidos con un férreo marcaje por parte de la línea de cinco de Javier Aguirre. El planteamiento secó al Athletic en los primeros compases, y fue el Mallorca quien llevó la voz cantante a nivel ofensivo. Sin embargo, ni Muriqi ni Larin estuvieron acertados.

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Con el paso de los minutos, el Mallorca cada vez tenía más problemas para frenar las acometidas de los 'Leones'. Nico Williams acaparó el peso ofensivo del equipo, convirtiéndose en un auténtico quebradero de cabeza por el flanco izquierdo, aunque el atino de Valjent impidió que sus múltiples llegadas se tradujesen en peligro real. La primera parte llegó a su fin con poca presencia de ambos equipos en área contraria.

El descanso sentó bien a los bermellones, que saltaron al césped con otro aire. Muriqi, con ayuda de la defensa bilbaína, llegó a celebrar el primer tanto del partido, pero la acción fue invalidada por fuera de juego. Ernesto Valverde captó el aviso, y acudió al banquillo en busca de una reacción. El equipo mejoró con la entrada de Muniain, que a punto estuvo de sorprender a Rajkovic con un disparo que tomó un efecto extraño.

El paso hacia adelante del Athletic tras la entrada de su capitán terminó siendo un espejismo. El Mallorca, más necesitado de puntos, buscó el gol con más ganas, y Muriqi llegó a acariciarlo en los compases finales. El kosovar pisó área completamente solo, pero Vivian apareció por sorpresa para barrer el balón de sus pies cuando preparaba el disparo.