La 'salvajada' de Kevin De Bruyne

Lo que está haciendo Kevin De Bruyne es digno de estudio. El belga, que prácticamente no ha podido participar en el primer tramo de temporada, regresó el pasado 7 de enero con ganas de volver a liderar al Manchester City. Desde su vuelta, ha generado nueve goles en los siete partidos que ha disputado. Dos tantos y siete asistencias.

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Calcular el promedio es fácil, incluso para aquellos que se llevan mal con las matemáticas. De Bruyne, entre goles y asistencias, genera más de un tanto para su equipo cada partido que juega. El dato es más impactante si se compara con los minutos de juego.

Únicamente ha sido titular en tres de los siete duelos que ha jugado desde su regreso, acumulando un total de 366 minutos sobre el verde. Eso significa que está fabricando un gol para el Manchester City cada 40,6 minutos.

NO PUEDE PARAR DE BRILLAR

Ante el Copenhague, partido correspondiente a la ida de octavos de Champions, volvió a jugar en la competición reina. Y lo celebró participando dándole la victoria a los de Guardiola participando en todos los goles con una diana y dos asistencias (1-3). Apareció en el minuto 11 para adelantar al City en el Parken Stadium con un disparo cruzado pegado a la base del palo de la portería de Grabara. En el 45', puso la punta del pie en un balón dividido para dejar a Bernardo Silva solo para finalizar a placer y marcharse por delante en el marcador antes del descanso. En el 92', le cedió el tercero a Foden con un buen pase atrás tras ganar la línea de fondo.

En su regreso, el pasado 7 de enero ante el Huddersfield en FA Cup (5-0), le sirvió el quinto y definitivo gol a Doku. Después, disputó únicamente 22 minutos contra el Newcastle, el pasado 13 de enero, en el que fue su primer partido en Premier League tras la lesión. Gracias al belga, el City se acabó llevando los tres puntos de St.James's Park. Entró en el 69' con el marcador en contra. Igualó el choque en el 74' con un latigazo que se inventó y le regaló el tanto de la victoria a Oscar Bobb, en el 91'.

Después vino el Tottenham, el pasado 26 de enero. Solo sumó 26 minutos y fue el único partido en el que ni marcó ni asistió. El 31 de enero, en su primera titularidad tras la lesión, quiso dejar su sello ante el Burnley (3-1) asistiendo a Julián Álvarez en el segundo tanto. Misma aportación que firmó cinco días después, contra el Brentford (3-1). Esta vez, le puso en bandeja el segundo a Foden, que marcó los tres tantos del encuentro.

Finalmente, y antes de volver a ser la estrella del City ante el Copenhague, calentó motores contra el Everton (2-0), el pasado 10 de febrero. Haaland desatascó un partido que se estaba antojando complicado con la colaboración de De Bruyne, que le puso un 'caramelito' a larga distancia para que el noruego pudiese explotar toda su potencia ante la zaga 'Toffee'.

Ya lo decía Pep Guardiola, un 'enamorado' confeso del belga. "Kevin es un jugador especial. Ve cosas que otros no pueden ver en el campo". Cuánto lo echaron de menos. Por suerte para el de Santpedor, está de vuelta, y más enchufado que nunca.