El VAR indulta al Barça en Valladolid

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

El Barça se impuso por la mínima, sufriendo, sobre un césped horrible y con el indulto del VAR, que anuló el empate del Valladolid en el último minuto. Cosas del fútbol moderno.

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LaLiga

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Alineaciones
REAL VALLADOLID
Masip, Moyano, Kiko Olivas, Calero, Nacho, Borja (Keko, 64'), Alcaraz, Anuar, Toni Villa (Verde, 86'), Óscar Plano y Enes Unal (Duje Cop, 70').
FC BARCELONA
Ter Stegen, Sergi Roberto, Piqué, Umtiti, Alba, Busquets, Rakitic, Coutinho (Malcom, 83'), Dembélé (Arturo Vidal, 75'), Messi y Suárez (Munir, 90').

Valverde dibujó el mismo sistema sobre el césped que ante el Alavés, pero, esta vez, con los once nombres que cualquiera supone titulares sin discusión. Sergi Roberto mantuvo su posición en el lateral derecho y Coutinho salió de inicio en el interior. El Barça lo puso todo sobre un césped inestable y lento para superar al Valladolid.

Los pucelanos respondieron con las líneas juntas y la voluntad de salir al contragolpe, su, en principio, única arma para hacer daño. La primera la tuvo Dembélé, a los cinco minutos, robando en zona defensiva y caracoleando hasta probar sin ángulo. Enes Unal enseñó las uñas llegando por banda y probando a Ter Stegen. Sergio González había vestido a los suyos con un mono de trabajo, pero con un cuchillo guardado en el bolsillo por si las moscas. 

El Barça llegaba alcanzaba el extraradio del área de Masip con relativa facilidad, pero abusaba del disparo lejano, con Dembélé y Coutinho a la cabeza. Messi arrancó dubitativo, perdiendo balones con frecuencia. El '10' ejecutaba a más velocidad de la que permitía el bosque del José Zorrilla. Todo el equipo parecía más lento e impreciso. El balón parecía un conejo huyendo a trompicones. Que llegara a la madriguera de Masip era cuestión de paciencia. Daba la sensación que, en cualquier momento, saldría un topo saludando a la grada

El Valladolid aprovechaba cualquier regalo, cualquier duda, para salir con mirada ensangrentada a por Ter Stegen, con Toni Villa y Unal liderando la ofensiva. Las mejores ocasiones para los blaugrana nacían siempre de las botas de Messi, que, en una de ellas, dejó solo a Dembélé. El francés centró horrible hacia Suárez cuando la jugada pedía remate. Al minuto fue el propio uruguayo el que no acertó ante Masip, impecable en la salida. 

El exportero blaugrana parecía un gigante, enviando a córner una rosca firmada por Coutinho que ya veía la red. Dembélé, taladro en mano, repetía una y otra vez la misma jugada por la izquierda. Faltaba acabar alguna y Messi lo intentó solo forzando una falta en la frontal que ejecutó alto. Llegó el descanso y el terreno de juego se llenó de operarios para tapar boquetes.

Valverde no cambió ni una coma de su relato en la segunda mitad. Apostar por el talento suele tener premio. Y así fue. Suárez, fuera del área, en la esquina zurda, la puso al segundo palo para que Roberto la bajara del cielo y la cediera atrás de cabeza para Dembélé. Disparo cruzado de primeras y patada a la lata. Valverde se secaba el sudor de la frente con el dorso de la mano mientras respiraba profundo. Los partidos hay que madurarlos. 

El Valladolid reaccionó dando un paso al frente, estirando líneas para llegar con mayor facilidad al área de Ter Stegen, que empezó a tener algo más de trabajo, compartido con sus centrales. Entró Duje Cop y se la puso a Keko, que había salido poco antes, pero remató de cabeza suave a las manos del meta alemán. Valverde sacó del campo a Dembélé y compactó el centro del campo con Arturo Vidal. El Barça creyó que estaba todo hecho y, con su actitud, perdió también el balón y el control. Papeles cambiados y los blaugrana, a la contra. Marcó así Suárez, a pase de Messi, pero lo hizo en fuera de juego.

Los últimos minutos desordenaron el partido y el Valladolid se sintió cómodo para buscar el empate. Le faltó acabar de creer en ello hasta que creyó del todo. Malcom, que salió por Coutinho, probó a la contra a Masip, pero fue Keko quien superó a Ter Stegen. De cabeza. El VAR indultó al Barça en Valladolid. El delantero había rematado en fuera de juego.