Deulofeu, la historia de un desengaño

Deulofeu se lamenta de una jugada

Deulofeu se lamenta de una jugada / JOAN MONFORT

Dídac Peyret

Dídac Peyret

Gerard Deulofeu se marcha cedido al Watford sin asperezas, pero con un regusto amargoEn su enésima etapa en el Barça no ha logrado encontrar su sitio en el primer equipo.

Esta vez ni su entorno busca culpables; Gerard se va sin un mal recuerdo de Valverde. Es más: valora las oportunidades que le dio en el arranque de temporada y lo claro que siempre ha sido con él.

El propio futbolista reconocía a finales de 2017 que le estaba costando soltarse. Que aún no jugaba con el desparpajo que necesita para que se viera su mejor versión. 

Gente cercana al futbolista recuerda que nunca fue sencillo triunfar en el Barça y que en ocasiones hay más presión para los jugadores de casa que para los de fuera.Lo sabe Deulofeu que trabaja con un coach, una práctica cada vez más habitual entre los jugadores de élite.

En el entorno del jugador se desconfió del interés de los equipos italianos las últimas semanas 

El extremo ha descubierto en los últimos años la cara menos romántica del fútbol. La sensación constante de eventualidad. De ahí que asuma con un realismo impropio de su edad que tiene que buscarse la vida fuera del Barça.

No es el único; en el propio club temen una nueva desbandada de jóvenes canteranos este verano en la línea de Sergio Gomez y Mboula ante la falta de oportunidades.

"Está acostumbrado a viajar, a estar fuera de casa. Ya salió con 18 años y si tiene minutos y lo hace bien seguro que se olvida de todo. No es el primero ni el último canterano que se ha tenido que ir", aseguran en su entorno.

Deulofeu era más partidario de volver a Italia, su mejor experiencia en el fútbol de élite, pero al final ni Milan ni Nápoles ni Roma han apostado por el futbolista.

La sensación que tiene el futbolista es que nunca fue la primera opción en esta ventana del mercado para estos equipos. Y que han especularon con otras opciones durante todo este tiempo.

Una sensación muy distinta a la del pasado verano, el momento en el que más interés hubo por el futbolista tras su explosión en el Milan. El Barça llamó entonces a su puerta y Deulofeu tuvo dudas.

Deulofeu trabaja con un coach desde hace tiempo para mejorar su rendimiento

El de Riudarenes terminó aceptando convencido de que tenía que quemar todavía un último cartucho, sobre todo porque nunca había tenido aún la oportunidad de pasar una temporada en la primera plantilla del primer equipo. 

La lesión de Dembélé le permitió tener minutos, pero Deulofeu no terminó de encontrarse. Fue una versión más maduro del futbolista, pero sin el atrevimiento que lo hacía un jugador distinto.

Valverde terminó apostando por otras opciones. El propio futbolista conocía las intenciones del técnico ya en diciembre. Y la llegada de Coutinho ha terminado de condenar al ostracismo al extremo.  

De ahí que Deulofeu haya terminado aceptando la propuesta del Watford. Quier jugar. Esa es su prioridad y la insistencia de Javi Gracia le ha terminado por convencer. Gerard sabe que si lo hace bien será un fijo en el equipo. 

La puesta en escena de sus primeros días lo deja claro. Deulofeu voló con un avión privado, pasó la revisión y ya se entrena con el equipo. La intención de Gracia es que entre en la convocatoria de mañana para el partido ante el Stoke a pesar de llevar muy pocos entrenamientos.

Le esperan tres meses para volver a disfrutar en el césped y en verano, cuando termine la cesión, volverá al kilómetro cero, una constante para un chico de solo 23 años que tuvo que crecer demasiado rápido.