MOTOR ROTATIVO DE MAZDA

El primer modelo de Mazda con motor rotativo cumple 50 años

El biplaza Cosmo Sport fue lanzado por la compañía japonesa el 30 de mayo de 1967 marcando un hito en el motor.

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El Mazda Cosmo Sport fue el primer automóvil del mundo con un motor de dos rotores. / MADZA

Àlex Soler

Àlex Soler

El Mazda Cosmo Sport fue uno de los vehículos más bonitos de su época. El fabricante japonés lanzó este biplaza el 30 de mayo de 1967 y su producción no superó las 1.200 unidades desde el 67 hasta 1972. Es por eso que hoy en día es uno de los automóviles más buscados por los coleccionistas. Sin embargo no es por el corto número de unidades que circulan por el mundo, ni tampoco por ser el primer deportivo de la firma, que es un vehículo famoso. El Cosmo Sport fue su primer modelo con motor rotativo.

MOTOR WANKEL

El motor rotativo o Wankel es un motor de combustión interna muy distinto al de los tradicionales motores de pistones. Se trata de un motor alternativo de 4 tiempos que, igual que su hermano de pistones, utiliza la presión producida por la combustión de la mezcla aire-combustible. La gran diferencia radica en que la presión está contenida en la cámara formada por una parte de la envolvente y cerrada por uno de los lados del rotor triangular, que reemplaza a los pistones. El rotor triangular delimita la envolvente en tres compartimentos separados. A medida que el rotor gira, por un lado se aspira aire y el combustible, comprime la mezcla para producir la explosión y luego expulsa los gases hacia el escape.

Estos motores, en su mayoría, desarrollan una mayor potencia que los motores cilíndricos debido a una mayor compresión aero-explosiva. Generalmente, dos rotores equivalen en potencia a seis cilindros de un motor convencional. Entre sus grandes ventajas destacan un menor peso, un menor número de piezas móviles y una mayor suavidad en marcha gracias a las pocas vibraciones que desprende. 

HITO DE LA MARCA

El Cosmo Sport fue el primer coche del mundo propulsado por un motor de dos rotores y la antesala de los motores rotativos de coches tan reconocibles como el Mazda RX-7 y el MX-5. Sin embargo, que el Cosmo Sport montara este sistema de propulsión no fue nada fácil. Los ingenieros de la firma japonesa necesitaron mucho tiempo para desarrollar y hacer viable este motor. Además, una vez montado, el Cosmo Sport tuvo que recorrer miles de kilómetros para poner a prueba la tecnología creada con las docenas de empresas que colaboraron con Mazda.

Una vez conseguido, el fabricante japonés produjo casi dos millones de vehículos con motor rotativo. Además, gracias a su potencia y bajo peso el este motor cosechó varios éxitos en competición. El RX-7 fue el rival a batir en los 80 en su categoría de la IMSA (International Motor Sports Association). Sin embargo, Mazda tiene un recuerdo especial de su victoria más importante.

En 1991, un 787B equipado con un motor rotativo de 2.6 litros y cuatro rotores se convirtió en el primer coche sin pistones en ganar las 24 horas de Le Mans. El motor del Mazda 787B entregaba 710 CV a 9.000 rpm convirtiéndolo en uno de los bólidos más rápidos del momento. Según los técnicos, después de los 4.932 km a una media de 205,38 km/h que hizo el ganador el motor podría haber soportado otras 24 horas sin problemas. Al año siguiente, un cambio de normativa desterró al motor rotativo de la prueba francesa.

Vea las fichas de la gama Mazda en Motor Zeta.

El motor rotativo es una de las señas de identidad de Mazda aunque actualmente no comercializa ningún vehículo con este tipo de propulsión. Sin embargo, en 2015 se presentó un prototipo llamado RX Vision, que pretendía devolver los motores rotativos a la carretera, por lo que no sería una tontería pensar que la firma japonesa piense en el motor Wankel para alguno de sus modelos de futuro.