Historia SPORT

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Tigst Assefa y los límites del ser humano

La etíope destrozó en la Maratón de Berlín el récord mundial por más de dos minutos y lo dejó en 2h:11.53

En su tercera maratón, la etíope logró una gran proeza con las zapatillas más ligeras de la historia, de la marca Adidas

Tigst Assefa logró en Berlín un récord de otro planeta

Tigst Assefa logró en Berlín un récord de otro planeta / EFE

David Rubio

David Rubio

La etíope Tigst Assefa (26 años) elevó el deporte femenino a las portadas de todo el planeta con el estratosférico récord mundial de maratón que logró el domingo en Berlín (2h:11.53) para acercarse a 113 segundos de la 'imposible' barrera de las dos horas y diez minutos.

La primera precursora moderna de esta eclosión del fondo femenino fue Paula Radcliffe. Con los movimientos de cuello que convertían su correr en agobiante, la británica rebajó dos veces en cuatro años la plusmarca de la keniana Catherine Ndereba en carreras mixtas hasta dejarla en 2h:15.25 con una rebaja final de 2:22.

La miembro de la Orden del Imperio británico reabrió el debate sobre los límite del ser humano y dio pie a comparaciones que destacaban la mayor capacidad de las mujeres para aguantar el sufrimiento a niveles extremos de exigencia.

Esta discusión llevaba años aparcada hasta que el domingo irrumpió Assefa para destrozar todas las teorías con unos colosales 2h:11.53 y dejar tiritando el anterior récord en posesión de la keniana Brigid Kosgei (2h:14.04).

Los detalles

La abisinia completó los 42.195 metros a 3:07 el mil... o a 19,2 km/h en la cinta de correr para que se hagan una idea. Su marca fue mejor que el mítico récord que estableció su compatriota Abebe Bikila en los Juegos de Roma 1960 (2h:12.11).

Era la tercera maratón para una atleta que debutó como internacional hace 10 años con un bronce en los Campeonatos de África en categoría júnior en 800 metros y una plata en relevos 4x400. El único precedente en este sentido es la neerlandesa de origen etíope Sifan Hassan (campeona mundial en 2019 en 1.500 y en 10.000 con la séptima marca del año en maratón (2h:18.33).

Assefa apunta a su sensacional marca en el Maratón de Berlín

Assefa apunta a su sensacional marca en el Maratón de Berlín / EFE

Assefa fue de menos a más para acabar en lo alto. Pasó la media maratón en 1h:06.20 a 3:08 el mil y 40 segundos por debajo del récord de Kosgei. Y voló en la segunda media con 1h:05.33 por debajo de 3:07 cada kilómetro. ¿Es posible que las mujeres rompan el muro de las dos horas y 10 minutos?

El debate lo ha puesto encima de la mesa Assefa al igual que hizo en su día un Kipchoge con las dos horas; él sí corrió por debajo de esta cifra redonda en octubre de 2019 (1h:59.40), pero con ayuda en una marca que nunca homologó con buen criterio World Athletics.

Las zapatillas

Al igual que en su día en la natación con los bañadores de poliuretano con los que se pulverizaron récords (prohibidos en enero de 2010), aquí la polémica está en las zapatillas con las que proliferan marcas ‘sub 1:58’ en 800 (11 atletas en 2023) o ‘sub 3:57’ en 1.500 (12).

Assefa corrió en Berlín con las ‘Adizero Adios Pro Evo 1’, las zapatillas más ligeras de la historia con solo 138 gramos de peso que salen hoy a la venta por 500 euros. Y no son “de usar y tirar” como erróneamente se ha publicado tal y como confirmó a SPORT la marca Adidas.

Assefa, corriendo con las ‘Adizero Adios Pro Evo 1’

Assefa, corriendo con las ‘Adizero Adios Pro Evo 1’ / AFP

Esta zapatilla encarna la evolución de la saga ‘ADIZERO’ con una geometría mejorada y un antepié en balancín que abarca el 60% de la longitud de la zapatilla con los objetivos de impulsar la zancada y mejorar la eficiencia al máximo.

Más ‘rápida’ que Kipchoge

La marca de 2h:11.53 que logró Assefa refleja un ritmo de 3:07 el kilómetro, a 39 segundos de la plusmarca de 1.000 metros de la rusa Svetlana Masterkova (2:28.98), mientras que la cadencia de 2:52 con la que estableció Kipchoge su vigente plusmarca (2h:01.09) está a 40 segundos del récord del mil del keniano Ngeny (2:11.96).

De forma paralela, la etíope corrió cada mil 15 segundos más lenta que el keniano el año pasado en Berlín, cuando la diferencia entre los citados récords mundiales masculino y femenino de 1.000 metros es de 17 segundos. Y sería ligerísimamente más rápida que la diferencia entre los récords de 1.500 con Hicham El Guerrouj (3:26.00 a 2:17.20) y el de Faith Kipyegon (3:49.11 a 2:32.48).