Isaac y la estirpe del joven goleador del Sevilla

Por segunda temporada consecutiva el Sevilla, siete veces campeón de la Europa League, sobrevive al borde del precipicio. El riesgo de descenso real. Los andaluces no pisan la categoría de plata desde 2001, cuando lograron su último ascenso a la élite. Desde entonces, 23 temporadas consecutivas en la máxima categoría y un reguero de títulos mediante que han convertido a los del Pizjuán en el sexto club de España, sólo por detrás de Real Madrid, FC Barcelona, Atlético, Valencia y Athletic. Drama se queda corto para expresar lo que supondría un descenso que, con todo, ha encontrado en la cantera argumentos para ahuyentarlo. Isaac Romero es la nueva conjura del Sevilla contra el pánico al pozo.

Amamantado en las inferiores hispalenses, este chaval de 23 años se ha convertido en un ‘fichaje’ invernal para Quique Sánchez Flores y su cuerpo técnico. En términos administrativos se le puede considerar un refuerzo. Nacido en Lebrija, el club le dio ficha del primer equipo y, desde que ha dado el salto, se ha convertido en goleador recurrente y esperanzador, más todavía ahora que En Nesyri ha causado baja por su presencia en la Copa África.

Los números de Isaac son, por ahora, llamativos. En sólo seis encuentros ha marcado cuatro goles: uno a Osasuna para empatar el partido, otro al Girona (el 0-1, aunque la cosa acabó 5-1) y un doblete ante el Getafe para eliminar a los azulones en Copa del Rey (1-3). Pólvora de la esperanza que también se nota en las apuestas de fútbol de Betfair. Que el Sevilla descienda a Segunda cotiza a una probabilidad implícita del 16%. Por delante, las cuotas ven ya como carne de Segunda a Almería, Granada y Cádiz. El Celta también está por delante del Sevilla en opciones de bajar. Los pronósticos mantienen la esperanza.

Estirpe de goleadores

El caso de Isaac Romero resulta llamativo en un club acostumbrado a dar grandes delanteros desde su cantera, pero que en las últimas temporadas no había terminado de encontrar un chico de las inferiores que cumpliera con ese rol de futbolista llegador. Hombres como Carlos Fernández, Juan Muñoz, Rodri, Alex Rubio o Borja Lasso amenazaron con una eclosión que nunca llegó. Isaac parece diferente. Digno sucesor de otros canteranos potentes.

Delanteros que el Sevilla fue sacando de su cantera durante el último tramo del siglo XX e inicios del siglo XXI para ir nutriendo sus sueños y plantillas. Quizá el caso más llamativo de esa camada de talento la protagonizara el malogrado José Antonio Reyes. El que también fuera extremo del Arsenal, Real Madrid o Atlético de Madrid explotó en la temporada 1999-200 y acabó dejando una historia de leyenda sevillista, con tres Europa League en su haber en su segunda etapa y 40 goles repartidos en 253 encuentros oficiales.

Antoñito, José Mari, Carlitos…

A nivel diferente, pero de un impacto corto similar al que está provocando Isaac están los casos de Antoñito, José Mari o Carlitos. El primero coincidió con Reyes y llegó a jugar cuatro temporadas completas en el Sevilla. Su récord goleador en el Sevilla fueron nueve goles en una misma temporada.

El segundo es anterior a Antoñito y fue caso sonado porque, apenas explotó en el Sevilla en la temporada 96-97, hizo las maletas para reforzar al Atlético de Madrid. Tenía apenas 18 añitos y había hecho siete goles en aquella campaña con el Sevilla. Luego hizo las maletas rumbo a Milan, Villarreal e incluso el Betis. Nunca fue lo que se imaginaba de él… pero en el Sevilla tuvo un impacto corto y positivo.

Casi coetáneo a José Mari es Carlos Domínguez, conocido como Carlitos, un delantero que debutó en la 95-96 con los andaluces y que se convirtió pronto en ídolo por su entrega y forma pilla de jugar. Fútbol de la calle que lo llevo a estar cinco temporadas con los andaluces. Jugador de arte y sacrificio que representaba como pocos los valores del club.