El Madrid le echa la culpa a Laporta y Xavi por las últimas polémicas arbitrales

En el club blanco creen que las últimas declaraciones han presionado a los colegiados

Se ven perjudicados al anularles tantos goles

Xavi vuelve a ser contundente en relación a los árbitros

Xavi, en la rueda de prensa previa al partido ante el Granada / PERFORM

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

En el Madrid echan humo con lo sucedido en Mestalla por el gol no validado por el colegiado Gil Manzano tras señalar el final del partido. El club blanco piensa tomar medidas ante el Comité Técnico de Árbitros porque creen que pueden perder la Liga y, según 'AS', culpan directamente a Xavi Hernández y Joan Laporta por las últimas polémicas que ha ido en su contra.

En el palco del Bernabéu ya veían con preocupación las constantes declaraciones de Laporta y Xavi hablando de los colegiados. El primero fue muy duro al criticar la actuación arbitral del Madrid-Almería. Laporta aseguró que el arbitraje en ese partido fue "una verguenza" y llamó al orden a los colegiados para que denunciaran las presiones que estaban recibiendo semana a semana por parte del Madrid a través de su televisión.

Xavi Hernández se ha mostrado crítico en algunas ocasiones y ha deslizado que sería muy complicado ganar la Liga con este tipo de arbitrajes. En el Madrid creen que estos ataques han ido haciendo mella en el colectivo arbitral, que ahora pita muy presionado en los partidos de los blancos.

El Madrid está muy enfadado por la cantidad de goles anulados esta temporada con la intervención del VAR y ya se quejó en su momento, aunque en algunos partidos ha sido beneficiado de forma clara. La situación que sucedió en Mestalla no puede definirse como gol anulado, pero el club ha pedido una explicación de los hechos ya que son dos puntos que podrían haber prácticamente sentenciado la Liga.

El club blanco va a actuar en los despachos al sentirse perjudicado. Además de la queja van a intentar evitar una dura sanción a Bellingham al considerar que sus palabras no son insulto alguno y solo fueron una queja asumible en un momento de máxima tensión. En el Madrid hay miedo de que la distancia con el Barça se vaya acortando y que el Clásico del Bernabéu se convierta, al final, en un partido absolutamente decisivo.