Cuatro prórrogas y una final: una cita histórica para Osasuna

"Estamos preparados. Ellos no lo sé. Llevamos cuatro prórrogas seguidas. Cuatro. Y nos da igual". La frase la gritó Jagoba Arrasate a los suyos un minuto antes de que el árbitro pitase el inicio de la prórroga en San Mamés. Era el partido de vuelta de semifinales y Osasuna perdía el encuentro por 1-0 (la eliminatoria estaba igualada 1-1). El resultado final es historia: Osasuna tiene la posibilidad de conquistar el primer título de su vida el próximo sábado seis de mayo en La Cartuja.

El camino ha sido largo. Muy largo, de hecho, por esas cuatro prórrogas consecutivas: contra Nàstic, Betis, Sevilla y Athletic. En los últimos meses el conjunto rojillo ha sido capaz de superarse a sí mismo en varias ocasiones, demostrando una gran capacidad de resistencia y sacrificio, sin perder la fe y llegando a la final siendo un equipo maduro.

De Abde a Pablo Ibáñez, pasando por Sergio Herrera o David García. Unos han venido de fuera y otros han crecido en casa. La clave del éxito esta temporada es la combinación perfecta del trabajo de Tajonar y la calidad de aquellos que convierten Pamplona en su segundo hogar.

Arrasate fue claro hace unos días sobre el papel de los más jóvenes: "Si a los canteranos los ponemos de inicio es porque sabemos que nos pueden ayudar. Están preparados y eso es una ventaja a la hora de entrar en la dinámica del primer equipo. Es una gozada para nosotros". Los navarros no pueden competir en experiencia ante todo un Real Madrid, pero sí en ilusión. Y muchas veces esta superado cualquier adversidad, máxime a partido único y en campo neutral.

18 AÑOS DE ESPERA PARA JUGAR OTRA FINAL

El recuerdo es amargo, pero Osasuna puede resarcirse 18 años después de aquella derrota ante el Betis en la final de la Copa jugada en el Calderón en la 2004/2005. En la previa del partido de LaLiga ante la Real Sociedad en El Sadar fueron homenajeados aquellos héroes: Moha, Pablo García, César Cruchaga, Patxi Puñal, Milosevic, Cuellar...

Ahora es el turno de una generación que ha vuelto a avivar el osasunismo tras unos años convulsos económica y deportivamente. Se esperan alrededor de 24.000 rojillos en Sevilla para hacer valer más que nunca el ser el jugador número 12.

"No nos genera un estrés alargar el partido hasta la prórroga o los penaltis", detalló Arrasate en el programa 'El Míster', de Movistar, antes de jugar en San Mamés la vuelta de semifinales. Una puntualización emocional que va en la línea del club, que ha exprimido esta frase en su campaña 'Cuestión de Alma': "Porque ser de Osasuna no va de ganar o perder, ser de Osasuna va de sentir".