Algo se mueve en Manchester

El río anda revuelto cuando se cumple una década de la marcha de Sir Alex Ferguson. El técnico abandonó el banquillo de Old Trafford en 2013 y desde entonces el club inició una decadencia que le ha llevado a ganar solo cinco títulos en estas temporadas y a tener hasta nueve entrenadores. Hoy el United es un caos de club, ubicado en la sexta posición de la Premier League y último en su grupo de la Liga de Campeones. Son unos resultados que reflejan lo que hoy es este gran club cuyo gran mérito es que los malos resultados deportivos no se traducen en una situación económica complicada. 

El United es un chollo para sus propietarios, la familia Glazer americana, que compró el club en 2005 por 1.160 millones y hoy su precio ronda alrededor de los 7.000 millones de euros. Los resultados deportivos no tienen nada que ver con los económicos, en este caso. Los 7.000 millones de euros no es el precio que vale hoy en día el United, sino que es lo que pide en las negociaciones de venta que mantiene con el Sheikh Jassim Al Thani, hermano del emir de Qatar y hombre clave en la consecución y la disputa del Mundial disputado en el pequeño emirato.

Los Glazer y Sheikh Jassim no han alcanzado un acuerdo, pero día a día las posturas se acercan. La oferta, según partes afectadas, era de 5.200 millones y el hermano del Emir ya ha encontrado un par de asociados en Qatar para subir 1.000 millones más su oferta. El juego sucio desde Inglaterra aumenta a través de filtraciones en la prensa para que la familia Glazer pueda acercarse a lo que pide. Que Qatar se ha quedado fuera de la carrera, que otras opciones cogen más fuerza… Lo clásico. Todo, sin embargo, parece indicar que esta vez están más cerca e incluso hay quien se atreve a pronosticar que estas Navidades podría producirse el acuerdo.

El United quiere un trueque Sancho - Raphinha

Qatar sabe que invertir en fútbol es un negocio seguro. Les fue bien con el Mundial y les va bien con el PSG, de la misma manera que les ha ido bien a la familia Glazer, que compró el United por un billón y puede venderlo por siete.

El PSG, también de fondos cataríes, fue comprado por 70 millones de euros y hace una semana QSI, su actual propietario, vendió un 12,5% a Arctos Sports Partner, un fondo de inversión americano, que no tendrá capacidad para decidir en lo deportivo al ser nuevo propietario minoritario. En estas negociaciones se estableció el precio actual del club y ya es de 4.584 millones de euros. O sea, que el PSG ha pasado de 70 millones a 4,5 billones de euros. Y, como el United, con escasos resultados a nivel internacional.

Ante todo este festival económico, en el que los millones parecen calderilla, se demuestra lo beneficioso que puede llegar a ser el mundo del fútbol para los que saben gestionar mejor el balance de cuentas que la elección de fichajes o entrenadores.