Solo Márquez está tranquilo

Arranca un Mundial en el que 20 de las 24 estrellas de MotoGP deben renovar sus contratos o cambiar de equipo

Los cuatro primeros puestos han sido para Àlex Rins (Suzuki), Marc Márquez (Honda), Joan Mir (SuzukiI y Jorge Martin (Ducati)

Marc Márquez.

Marc Márquez. / AC MANAGEMENT

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

El Mundial de MotoGP no ha podido arrancar de forma más impresionante. Cierto, es el primer día, pero la pelea, la velocidad, el coraje de todos sus protagonistas ha sido impresionante. ¡Ya no digamos de los españoles! Los cuatro primeros puestos han sido para Àlex Rins (Suzuki), Marc Márquez (Honda), Joan Mir (SuzukiI y Jorge Martin (Ducati). Pero, repito, solo es el primer día.

El primer día, todo hay que decirlo, de un año, no solo apasionante porque ha regresado el campeón de la última década, Márquez, que hoy se ha sentido estupendamente sobre su nueva Honda (“no me ha dolido nada el brazo derecho y espero que, tras dormir estupendamente, mañana siga igual”), sino porque es año de renovaciones, pues, en estos momentos, 20 de los 24 pilotos, que componen la parrilla reina, acaban sus contratos este año. Solo Márquez (hasta el 2024), Franco Morbidelli (2023), Brad Binder (2024) y, recientemente, ‘Pecco’ Bagnaia (2024) pueden correr tranquilos.

Eso significa que los pilotos, todos, sí, sí, todos, empiezan la competición sabiéndose observados por fábricas y equipos, que ya han empezado a mover sus hilos en el ‘paddock’. Fabio Quartararo, el campeón de Yamaha, ya bromeó, en la conferencia de prensa del jueves, desmintiendo (entre risas) tener una oferta de Honda. Pol Espargaró, colega de MM93 en el ‘team’ Repsol Honda, insiste en que “el que quiera mi moto va a tener que quedar por delante mío”. Livio Suppo, nuevo ‘team manager’ de Suzuki, dice que su objetivo es renovar a su pareja española, integrada por Joan Mir y Àlex Rins, pero es Suppo.

Todo el mundo es consciente de que la feria ha empezado y por eso Ducati, que no gana el título desde el 2007, ha querido asegurarse al subcampeón del mundo antes de que empiece la fiesta. Y, ya que estamos en Ducati, la eterna candidata, digamos que Jack Miller, por ejemplo, no tiene su asiento (ni renovación) asegurado ¡ni mucho menos! El jovencísimo, intrépido, atrevido y velocísimo Jorge Martín, el mejor ‘rookie’ del 2021 y en el equipo satélite de la firma de Borgo Panigale, es un firme candidato a heredar esa moto si mejora (“quiero ganar tres o cuatro carreras este año”) su espectacular rendimiento del pasado año.

En Honda, pese a la insinuación de ‘Polyccio’, todo parece indicar que el pequeño de los Espargaró es candidato a seguir compartiendo ‘box’ con MM93. La moto de este año es un tiro, va muy bien, ‘Polyccio’ se ha adaptado a ella de maravilla, se lleva muy bien con el ocho veces campeón del mundo y, fijo, su temporada será lo suficientemente buena, competitiva y exitosa como para que Alberto Puig no dude en alargar su contrato.

Más lio, mucho más lio, tendrá Yamaha y su curioso manager Lin Jarvis para retener al ‘Diablo’ Quartararo al que, de momento, según ha contado hoy el francés, le han dado una moto “que no corre, todas me sacan 10 kms/h. en la recta y no tiene agarre; me temo que todos han dado un paso adelante, menos nosotros”. Eso sí, Jarvis y Yamaha parecen acostumbrados a trabajar en la cuerda floja pues, el año pasado, se les lesionó Morbidelli, empezó a jubilarse Valentino Rossi y volvió a despistarse ¡y de qué manera! Maverick Viñales y, sin embargo, ganaron el título gracias a Quartararo.

Cuentan que los japoneses de Yamaha están pensando, incluso, recuperar al nuevo campeón del mundo de Superbikes, el turco Toprak Razgatlioglu, que tiene muchas ganas de volver a MotoGP. Y cuentan, también, que en la agenda de Jarvis sigue estando el joven Raúl Fernández, a quien KTM retuvo el pasado año, y la bomba de la temporada, el murciano Pedro Acosta.

Y es que KTM, cuyo comportamiento muy irregular en la pista (Binder ha sido hoy el primero por la mañana y el 15º, por la tarde), hace dudar a muchos, se ha convertido en la nueva y fantástica escuela de campeones, casi mejor que la VR46 de Valentino Rossi (por cierto, el ‘Doctor’ ha sido hoy papá de una niña, Giulieta), y, en ese sentido, espera poder sacar brillo, con Fernández y Acosta a su inversión, pero…ambos jóvenes son demasiado tentadores para las otras marcas en un año de mercado permanente.

Hay que mirar, también, cómo no, a Aprilia, la firma que, paso a paso, sin prisas pero sin pausas, con cabeza, humildad, talento, innovación y serenidad, ha puesto en manos del veterano Aleix Espargaró y Maverick Viñales una moto ganadora. Aleix, a sus 32 años, aún no ha dicho qué piensa hacer, pero está en el centro de un proyecto precioso, en su mejor momento y con el ambiente ideal, de ahí que, ayer, dijese en Catalunya Radio que “mi intención es seguir, al menos, un año más”.

El regreso, insisto, del italiano Suppo, antes en Honda y, ahora, tras cuatro años sabáticos, nuevo ‘team manager’ de Suzuki, ha llamado la atención su regreso en una temporada tan movidita. Suppo es de los pistoleros que más rápido desenfunda del ‘paddock’ y nadie se extrañaría si, tras renovar a Mir, observa el año de Rins para recomendar a los japoneses cambiar al catalán quién sabe si por Fernández o Acosta, pilotos que cautivan a todo el mundo.