Míchel pide perdón tras la rajada de David López: "Se ha equivocado"

El técnico del Girona abordó la polémica entre su futbolista y Ortiz Arias, el árbitro del partido

Respecto al nivel del equipo, comentó que el vestuario "tiene mucha confianza y está en un momento de forma espectacular"

Míchel, concentrado durante el partido ante el Almería

Míchel, concentrado durante el partido ante el Almería / EFE

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El técnico del Girona, Míchel Sánchez, comentó la polémica entre David López y Ortiz Arias tras el triunfo de este domingo ante el Almería (5-2) "Estaba hablando con el árbitro. He ido a pedirle perdón por las declaraciones de David, creo que se ha equivocado. Han tenido un rifirrafe por dos acciones y David se ha calentado. El arbitraje ha sido bueno y no ha influido en el resultado"

"No le ha dejado ponerse el anillo y la pulsera al principio y se ha calentado. Tenemos que intentar ayudar a los árbitros con las declaraciones. David es un profesional espectacular y ha tenido un error por el que pedimos perdón", añadió para zanjar la polémica.

Respecto al nivel del equipo, comentó que el vestuario "tiene mucha confianza y está en un momento de forma espectacular" y reconoció que"disfruta mucho" viendo atacar a sus futbolistas.

Míchel admitió que el inicio del partido fue "bastante malo en concentración sobre todo" y que el equipo debe ser más contundente: "Lo de los primeros minutos no puede pasar porque te puede condicionar un resultado".

Con todo, dijo que el 1-2, obra de Iván Martín en el minuto 37, metió al Girona en el partido y generó "dudas" al Almería, un equipo que encaja muchos goles, y que a continuación Artem Dovbyk marcó "dos golazos" para llegar al descanso con un gol de ventaja (3-2).

El entrenador madrileño remarcó que a partir del doblete de Dovbyk "el partido ha estado muy controlado" y que la segunda del Girona parte fue "muy buena".

Míchel apuntó que su preocupación "no es la fase ofensiva porque tenemos mucho fútbol y mucha capacidad de hacer daño a cualquier rival, muchos recursos", por lo que si el Girona logra jugar con "con mentalidad, concentración y agresividad en la fase defensiva sería un equipo muy difícil de ganar".

También agradeció la "confianza" del club en su trabajo y celebró poder llegar a los 100 partidos con el Girona "en una posición privilegiada", colíder de Primera.

"El objetivo está muy claro que es llegar cuanto antes a consolidar el club en Primera División, que ya sería un éxito tremendo. Ojalá podamos mirar más arriba lo más rápido posible, pero hay que ir partido a partido. El equipo está muy bien, pero cuesta mucho ganar puntos", concluyó Míchel.