Barça o Madrid: ¿Quién llega mejor al clásico?

Barça y Real Madrid se ven las caras este miércoles en el Camp Nou. Será el segundo clásico de la temporada, el primero con el duelo en los banquillos entre Ernesto Valverde y Santiago Solari. En pocos días, se enfrentarán en tres ocasiones y habrá empacho, si es que esto es posible, de clásico. Pero, ¿quién llega mejor a la cita?

El Barça es el incontestable líder de LaLiga y ha hecho mucho daño a su máximo rival en los duelos de los últimos años, pero el camino hacia las 'semis' coperas ha sido más 'accidentado' que el de los blancos, que atraviesan por su mejor momento. Analizamos los puntos que pueden ser determinantes para calibrar las opciones de unos y otros.

Un Barça más 'espectacular' en los últimos clásicos

El último precedente lo dice todo: 5-1 para los azulgranas y sin Leo Messi, así que en caso de que el argentino no llegara para ser titular, o se le reservara, habría que aferrarse a este choque liguero jugado el pasado 28 de octubre, aunque eso sí, con Lopetegui en el banquillo blanco. Solari, por tanto, llega 'limpio' a la cita.

La temporada pasada, la 2017-2018, se enfrentaron hasta cuatro veces en partido oficial y el balance fue de dos victorias para el Real Madrid, las de la Supercopa de España, un empate de Liga en el Camp Nou (2-2) y un gran triunfo azulgrana, también liguero, por 0-3 en el Santiago Bernabéu.

Así pues, toca convenir que los duelos están más igualados en cuanto a balance de lo que se piensa, lo que ocurre es que cuando el Barça engrasa la maquinaria en el clásico es capaz arrolla a su rival y deja instantáneas para la eternidad.

En el cómputo histórico de enfrentamientos, la igualdad es casi máxima: de 239 enfrentamientos, 95 victorias del Real Madrid, 50 empates y 94 victorias azulgranas.

Los precedentes en Copa del Rey también están muy parejos. El último partido entre ambos fue la final de 2014 en Mestalla con triunfo blanco (1-2), pero el Barça le ha ganado más eliminatorias al Real Madrid (7 a 6) y es, además, el Rey de Copas: 30 títulos conquistados por 19 de los blancos.

Del clásico de octubre a hoy

Han pasado poco más de tres meses desde que el Barça le endosó una 'manita' al Madrid de Lopetegui. Pesó mucho más la descomposición blanca en esos momentos que la ausencia del mejor del mundo. Julen fue cesado tras ese choque y se inició en ese momento la 'era Solari'.

Los números vuelven a estar igualados, si bien con matices. Desde ese día, el Barça ha jugado 21 partidos, de los que ha ganado 14, con 4 empates y 3 derrotas. El Real Madrid ha disputado dos encuentros más, los del Mundial de Clubs, y el registro es de 18 triunfos, 1 empate y 4 derrotas.

En Liga, el Barça le saca dos puntos más al Madrid que cuando se fue Lopetegui, así que Solari solo ha podido frenar la sangría. Los matices hay que buscarlos en la Copa del Rey: el Barça ha perdido dos partidos, en el Ciutat de València y el Sánchez Pizjuán, que quedaron en anécdota tras remontar en el Camp Nou. Y en el caso del Sevilla, con una exhibición (6-1) que todavía refuerza más a los de Valverde.

El Barça se mantiene, el Madrid se lo cree

Es cierto que el Real Madrid atraviesa su mejor racha de la temporada, con cinco victorias consecutivas (Sevilla, Girona en dos ocasiones en la Copa del Rey, Espanyol y Alavés), que jugadores como Benzema o Modric están recuperando su mejor versión o que Vinicius ha irrumpido ya con fuerza, pero los argumentos del Barça son muy poderosos.

Los de Ernesto Valverde tropezaron este fin de semana ante el Valencia (2-2), pero venían de ocho victorias consecutivas en la Liga. Y por si fuera poco, ese empate ha acabado siendo de oro tras el KO del Atlético en el Benito Villamarín. El estado de Messi y de Dembélé, que puede regresar, tiene en vilo al barcelonismo, pero al margen cuenta con jugadores muy determinantes: Ter Stegen es un seguro de vida, Jordi Alba no se cansa de dar asistencias, Arthur cambia los partidos y Luis Suárez es un 'killer' del área que siempre responde en este tipo de partidos.

Se vienen, no hay duda, unos clásicos apasionantes.