Un tesoro llamado Ivan Rakitic

German Bona

German Bona

Ernesto Valverde tiene un tesoro con Ivan Rakitic. Y lo sabe. Cada vez que tiene ocasión, el 'Txingurri' se deshace en elogios hacia el centrocampista . "Para equilibrar el campo es impagable", dijo después de firmar el croata una gran actuación ante el Betis, abriendo la 'manita' y rematando con una asistencia. "Es como una balanza y tiene gol, estrategia y trabajo. Es un lujo tenerlo con nosotros", añadió  tras una victoria ante el Atlético que dio media Liga. "Es fiable al cien por cien, me parece extraordinaria su temporada", sentenció el técnico cuando se lesionó hace poco Sergio Busquets y ya se intuyó quién iba a ocupar su posición.

Fue Rakitic quien asumió esa gran responsabilidad. Sí. Y cumplió con brillantez. Todo lo que hace , lo hace bien, y con Valverde ha encontrado un técnico que le da confianza y sabe exprimir al máximo sus cualidades. El croata es imprescindible en el proyecto del técnico vasco, lo necesita para su filosofía de juego, sin grietas, sin conceder nada al rival, pero mandando a base de combinación y talento. Rakitic le da al Txingurri todo lo que pide, pero también para el croata ha sido un soplo de aire fresco la llegada al banquillo de alguien con tanto sentido comñun. Se han encontrado y el Barça se beneficia.

SUMA MÁS MINUTOS QUE LA PASADA CAMPAÑA ENTERA

Y es que Ivan Rakitic, que llegó al Barça a la par que Luis Enrique, nunca acabó de entender al asturiano. Fue clave también para 'Lucho', eso es cierto, jugó un montón de partidos, marcó goles, dio asistencias... levantó títulos, pero algo no acabó de funcionar del todo. Llegó a desesperarse sobre todo cuando miraba al césped y veía, día sí, día también, su dorsal '4' en la maldita tablilla de los cambios. Situación que fue minando la confianza en un técnico del que el croata, al que nunca le han ido las controversias, aseguró un día: "Me tiraría de un puente por él".

A quien se cree realmente con los ojos cerrados es a Ernesto Valverde. El 'Txingurri' lo ha hecho jugar en todos los partidos de la temporada excepto en dos, la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey ante el Murcia, sobra decir que era un juego intrascendente, y el partido de Liga ante el Espanyol en Cornellà-El Prat. Se quedó en el banquillo y el Barça no pasó del empate. Le faltó su equilibrista.

El resto, lo ha jugado todo, y además con papel protagonista. En el 4-4-2 con el que más cómodo se siente el técnico vasco, Ivan Rakitic es fundamental al lado de Busquets. Capaz de sacar la escoba y barrer todo lo que pasa por su lado, también tiene visión de juego y llegada. Su inteligencia táctica está a la altura de los más grandes, y eso le permite rendir a un notable nivel también de interior cuando toca jugar con el tridente y hasta de mediocentro cuando 'Busi' ha faltado.

Es imprescindible para Valverde y se demuestra en hechos, no en palabras. Suma en todas las competiciones 3.614 minutos, cuando la pasada campaña la cerró con 90 menos, es decir, 3.524 minutos. También supera ya la participación de la primera temporada entera de Luis Enrique (3.344 minutos) y rebasará, a buen seguro, la de la segunda (4.065 minutos).

el gladiador de valverde

El Barça no jugó su mejor partido el miércoles ante la Roma, y aun así, Rakitic dio ejemplo de su tremendo equilibrio y fiabilidad. Fue el mejor gladiador azulgrana. Recuperó ocho balones y uno de ellos sirvió para abrir el marcador. Dio una 'media asistencia' en el segundo, pues terminó en gol en propia puerta, y se hartó de dar pases con un altísimo porcentaje de efectivad, como siempre.

Tomando como referencia las dos competiciones principales, la Liga y la Champions, Rakitic promedia números de escándalo. Cada partido, reparte una media de 74,22 pases y recupera 6,2 balones. Y lo hace sin aparentes bajones de juego, pues la regularidad es también uno de sus fuertes. Aunque su cometido no sea este, a estos datos hay que añadirle cuatro goles, entre ellos, el que dio el pase a la final de Copa, y otras cuatro asistencias.

Rakitic ha llegado recientemente a la treintena y lo hace con la dosis exacta de madurez y ambición. Por delante tiene la búsqueda del triplete con el Barça y el Mundial con una Croacia siempre peligrosa que pondrá a prueba a la Argentina de su amigo y admirado Leo Messi. MIentras, Ivan sigue subiendo peldaños y conquistando los corazones de los aficionados azulgranas, cada vez más conscientes del tesoro que encierra su equipo.