LaLiga y el CSD dan una moratoria de dos meses al Barça para los avales

LaLiga había conminado al FC Barcelona a avalar 124.651.950 euros antes del 29 de noviembre, so pena de ejecutar el aval que está depositado en Banc Sabadell por la misma cantidad desde el pasado 17 de marzo y por el que todos los directivos, y avalistas, pagan la correspondiente comisión.

Esta moratoria obedece a la intención de ambos organismos de ayudar al FC Barcelona, así como a Real Madrid, Athletic Club de Bilbao y Osasuna, a que pueda acogerse a los beneficios de la nueva Ley del Deporte, que permitirá que los clubs que no son SAD no tenga la obligación de avalar el 15% del presupuesto de gastos y sí un tramo muy inferior, en torno al 3% en su franja más corta.

Está previsto que la nueva Ley del Deporte entre en vigor en enero y, por lo tanto, sería un gran balón de oxígeno para Laporta y sus directivos, que verían reducido el importe del aval de forma más que considerable, ya que pasaría de los 124 millones actuales a tan solo 23 millones. En cualquier caso, la LFP también avisó que el 17 de enero se cumplirán los tres meses de la celebración de la Asamblea del FC Barcelona, donde se aprobó el cierre económico de la 20-21 y el presupuesto de la 21-22 y que, por tanto, ya podrá comunicar a la junta qué cantidad de dinero tendrá que avalar por las pérdidas acumuladas de la temporada 2020-21, tal y como exige la Ley del Deporte que, aunque vaya a ser modificada, no puede tener efectos retroactivos.

Expediente informativo

La facultad del FC Barcelona de acogerse al nuevo tramo del aval debe ser sometido a la aprobación de los socios del club ya que es una modificación de los Estatutos, de ahí que la entidad azulgrana tenga la intención de convocar una asamblea o una consulta. Esta debería tener lugar poco tiempo después de la entrada en vigor de la nueva Ley del Deporte.

Recordemos, tal y como publicó SPORT el 18 de octubre, que LaLiga abrió un expediente informativo al FC Barcelona, que no disciplinario, para analizar el cierre económico del club presidido por Joan Laporta y calcular el importe del aval 21-22 y la responsabilidad de las pérdidas de la 20-21. Para ese cometido solicitó al CSD una auditoria independiente, una decisión que no ha gustado nada en el seno de la entidad azulgrana.