Jorge Mendes: de la desconfianza a la renovación más clave

Durante las conversaciones con el FC Barcelona para renovar a Ansu Fati, el representante portugués no ha realizado ningún movimiento sin consultarlo con el futbolista

Ha defendido los intereses de la joya de la Masia, pero también ha tenido cintura para hacer realidad su sueño: triunfar en el Barça

Ansu Fati: "Siempre mi sueño ha sido triunfar en el Barça"

Ansu Fati: "Siempre mi sueño ha sido triunfar en el Barça" / @FCBarcelona_es

Jordi Carné

Jordi Carné

El latido de los corazones barcelonistas se aceleró cuando Jorge Mendes ‘fichó’ a Ansu Fati el verano de 2020. Los aficionados culés se tomaron el movimiento del portugués con mucho recelo. No gustó que el distinguido representante de Cristiano Ronaldo, José Mourinho, Joao Félix, Bernardo Silva y Di María, entre muchas otras figuras de la élite futbolística, ‘pescara’ en la Masia. Los rumores sobre el interés de los mejores clubes de Europa en obtener los servicios del hispano-guineano acrecentaron una desconfianza que el inevitable paso del tiempo y la ausencia de novedades en clave azulgrana engrosaron todavía más. El agente de Cristiano y Mourinho, con pasado madridista, empezó a trabajar con el máximo exponente del nuevo ciclo culé.

Pero ahí estaba Jorge, en el Auditori 1899 después del acto de renovación de Ansu, junto al gran protagonista y a su padre Bori, con el que abandonó las instalaciones tras el mismo. Sonreía, satisfecho, mientras les fotografiaban. Pendiente de su teléfono, como es habitual, charlaba tranquila y apaciblemente con Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça, y con Mateu Alemany, con el que durante unas semanas negoció personalmente –y de forma “amistosa” según Joan Laporta– el acuerdo que se rubricó y celebró este jueves cerca de un Camp Nou que encuentra en Fati la mayoría de motivos para ilusionarse tras el triste adiós de Leo Messi. Siempre hay algo a lo que agarrarse.

Los agentes son capaces de casi todo. Pueden salvar o arruinar carreras. Pueden aconsejar mejor o peor a sus clientes. Pueden guiarse más o menos por sus comisiones y, en función de eso, obrar en una u otra dirección. Lo que no pueden hacer es condicionar a los jugadores que no vacilan en la voluntad de hacer realidad sus sueños. Ansu avisó a Mendes que quería triunfar en el Barça y el representante portugués afrontó las negociaciones con la cúpula azulgrana, que se alargaron mucho menos de lo esperado, con esa premisa entre ceja y ceja. Nunca dejó de pensar en los intereses del joven jugador. Y eso, evidentemente, también obligó al club a realizar más esfuerzos de los que quería inicialmente.

Durante las conversaciones, Jorge no realizó ningún movimiento sin el consentimiento de Fati y de su familia. Lo consultó absolutamente todo. Algunos de los viajes que realizó a Barcelona fueron, principalmente, para reunirse con ellos y ponerles al día de la situación. Las buenas relaciones con Laporta también ayudaron a que el final fuera feliz para las tres partes, que ahora esperan que todo salga bien sobre el césped para que las respectivas aspiraciones, también las económicas, aumenten la próxima vez que se citen en los despachos.