Heurtel se defiende para justificar su fichaje por el Zenit: "Como si yo cogiera un arma..."

El base francés 'traicionó' a su país firmando por un equipo ruso tras haber firmado un documento en el que juraba que no lo haría

Dicha decisión le ha cerrado de manera definitiva las puertas de la selección gala

Thomas Heurtel, en un partido con el Zenit

Thomas Heurtel, en un partido con el Zenit / Zenit

Marc del Río

Marc del Río

El fichaje de Thomas Heurtel por el Zenit de San Petersburgo todavía sigue trayendo cola, teniendo en cuenta que la temporada encara su tramo final. La llegada del base galo al conjunto ruso se podría entender como un movimiento más del mercado de fichajes, pero su llegada a Rusia trajo consigo mucha controversia y una traición tratada casi como asunto de Estado.

La medida que tomó la Federación Francesa de Baloncesto, de hacer firmar un documento a todos los jugadores del equipo masculino de baloncesto en el que rechazaban tener cualquier relación contractual con equipos rusos puede ser considerada más o menos polémica, más o menos innecesaria. Pero las normas se sabían desde el primer momento, y Heurtel, que lo tenía muy avanzado con el equipo que dirige Xavi Pascual, se esperó a colgarse la medalla de plata en el Eurobasket para hacer oficial el anuncio de su desembarco en San Petersburgo.

El ex jugador de Barça y Real Madrid ya intentó justificar su decisión a principios de temporada, dejando bastante claro que el hecho de perderse el Mundial del próximo verano, o los Juegos Olímpicos de París en 2024, le importaba más bien poco. Pero ahora, Heurtel ha vuelto a romper su silencio, con un tono todavía más elevado y haciendo algunas comparaciones desafortunadas con el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

Heurtel: "Quería divertirme en pista tras un año duro en Madrid"

En una entrevista con 'L'equipe', el base galo ha argumentado los motivos por los que acabó firmando por el Zenit, en un tono algo elevado tanto suyo como del entrevistador: "Era lo mejor para mí y para mi familia, por lo económico y por el proyecto deportivo. Sabía que iba a jugar mucho, el club y el entrenador me dijeron que sería uno de los líderes del equipo. Iba a volver a divertirme en pista después de un año complicado en el Madrid, y eso es lo que quería”, comenzó diciendo.

"Los que se dedican a insultarme… es como si yo cogiera un arma y fuera a pelear"

"Que cobre aquí no significa que esté de acuerdo con lo que se hace. La gente que dice en las redes que no haría lo que he hecho yo… es hipocresía, eso lo dicen los perdedores. No se han puesto en mi lugar, no se ven en la situación de ganar lo que gano yo. Pero está bien ir a la tele a decir que no está bien, y que están muriendo niños en la guerra. Gano dos o tres veces más que lo que ganaría en otro club europeo. Si el año que viene tengo un buen proyecto deportivo y el mismo dinero en otro sitio, me voy. A partir de ahí, la gente puede no estar de acuerdo, pero los que se dedican a insultarme… es como si yo cogiera un arma y fuera a pelear. No, solo estoy haciendo mi trabajo”, explicó un Heurtel bastante desafortunado con la alusión a las armas, y que deja clarísimo que está en Rusia por dinero.

Heurtel pone de ejemplo a otros países

El base también ha puesto de ejemplo a otros países y sus políticas, dejando en el aire la reflexión sobre si los jugadores que juegan en dichos territorios también tendrían que negarse a hacerlo: "Pero por esa lógica no se podría jugar en China, en Israel… habría que aplicar lo mismo todos, no solo para mí. ¿Qué tiene que ver la guerra con mi situación? Donde yo juegue no significa que apoye lo que hace Rusia. Aquí no conozco a nadie que lo haga. Entonces, ¿la gente que juega en China aprueba la política de derechos humanos de China? ¿Los que juegan en Francia están de acuerdo con todo lo que hace el gobierno allí? Pues esto es igual. Claro que no quiero que maten gente en esta guerra".

¿Qué hubiese pasado si la guerra llega a San Petersburgo?

También ha sido interesante la revelación que ha hecho el francés sobre como fueron las negociaciones con Zenit, y que hubiese pasado en caso de que el conflicto hubiese escalado y hubiese llegado a San Petersburgo: "Sí, al principio sí. Pero el club me tranquilizó, me explicó la situación. Y me dijeron que al menor indicio de desastre, subían a los jugadores a un avión rumbo a Estambul o Dubái. Y cuando llegué vi que aquí la vida transcurría bien, sin problemas. Trato de hacer mi trabajo lo mejor que puedo y que mi mujer y mis hijos tengan el mejor futuro posible y sean felices en el día a día. Tuve otras ofertas, pero peor pagadas", concluyó.