La renovación de Ancelotti por el Real Madrid tiene trampa

Florentino Pérez ha escenificado antes de acabar el año la renovación de Carlo Ancelotti. Un golpe de efecto en toda regla, teniendo en cuenta que la selección de Brasil tenía al técnico italiano como prioridad para construir un nuevo proyecto ganador.

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El presidente del Real Madrid se ha colgado una medalla ante el madridismo, encandilado con la capacidad de Ancelotti para mantener el nivel del equipo a pesar de las numerosas lesiones que han asolado a la plantilla madridista en esta primera parte de la temporada.

El veterano entrenador italiano ha sido capaz de clasificar al equipo para la Champions League con pleno de victorias en la fase de grupos. Y entrar en 2024 como líder de la Liga EA Sports por el mejor goal average general respecto al colíder Girona. Todo ello con tres lesionados de larga duración y media plantilla instalada en la enfermería.

A ello hay que sumar su voluntad de continuar en el Real Madrid. Ancelotti nunca ha escondido que su prioridad era alargar su estancia en el banquillo madridista. Y siempre ha apuntado que si el club estaba satisfecho con su trabajo, por su parte no habría ningún problema para renovar. Y así ha sido.

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Con el anuncio oficial de la renovación de Ancelotti, Florentino ha matado dos pájaros de un tiro. Por un lado, satisface al madridismo, al que mantiene en el bolsillo. Por otra, envía un mensaje de continuidad a la plantilla de cara al tramo decisivo de la temporada con un contrato, además, por dos temporadas.

Pero el presidente del Real Madrid se ha guardado un as bajo la manga por si las cosas se tuercen. Según una información de 'Onda Cero', el Real Madrid tendría la potestad de deshacer el acuerdo si el equipo se queda en blanco esta temporada. Es decir, el contrato firmado por Ancelotti hasta 2026 tiene trampa.