¿Podría el Brighton tener al sustituto de Potter en su mediapunta?

El fichaje de Graham Potter por el Chelsea ha precipitado que Andrew Crofts, técnico del filial, se convierta en el entrenador interino del primer equipo

Adam Lallana, futbolista de 34 años del Albion y una de las voces autorizadas del vestuario, formará parte del cuerpo técnico de forma temporal

Lallana llegó a Brighton en 2020 y ahora hará de jugador-entrenador | AFP

Lallana llegó a Brighton en 2020 y ahora hará de jugador-entrenador | AFP / Lallana llegó a Brighton en 2020 y ahora hará de jugador-entrenador | AFP

Albert Isern

Adam Lallana formará parte del cuerpo técnico del Brighton & Hove Albion después de que el Chelsea asignara al que hasta entonces era su entrenador, Graham Potter, como reemplazo de Thomas Tuchel en el Chelsea.

El futbolista de 34 años llegó a Brighton en 2020, cuando ya se encontraba en un punto maduro de su carrera. Desde entonces, además de ser un jugador de notable importancia dentro del terreno de juego, también es una de las voces autorizadas del vestuario.

Pese a que será Andrew Crofts, técnico del filial, quien cumpla con la función de entrenador interino, Lallana -actualmente baja por lesión- dejará su rol dentro del campo para aplicarlo desde el banquillo mediante su nuevo puesto en el 'staff' del Albion.

No es la primera vez que un futbolista de la Premier League lleva a cabo funciones temporales como miembro del cuerpo técnico. La pasada campaña, cuando el Burnley destituyó a Sean Dyche, la fórmula por la que optó el club de Lancashire fue la misma.

Mike Jackson, quien por aquel entonces dirigía al segundo equipo del Burnley, ejerció como técnico interino, mientras que Ben Mee, el capitán de los 'Clarets', pasó a ser técnico asistente de forma temporal, ya que además, el central se encontraba lesionado en aquel momento.

El Brighton visita este sábado el Vitality Stadium de Bournemouth (16h) y lo hará ya con el nuevo cuerpo técnico interino, de modo que Lallana tendrá su primera experiencia en los banquillos, donde podría ser un habitual en los próximos años.