El 'terremoto' Taylor Swift aterriza en la Super Bowl

La Super Bowl no tan solo es el evento deportivo más visto de Estados Unidos por ser la gran final de la NFL. El partido por el campeonato entre los Kansas City Chiefs y San Francisco 49ers en el Alliegant Stadium de Las Vegas tendrá una de sus mayores protagonistas fuera del césped, una Taylor Swift que lleva acaparando gran parte de los focos mediáticos desde el inicio de temporada. ¿El por qué? Su relación amorosa con uno de los mejores jugadores de la historia y actual miembro de Chiefs, Travis Kelce.

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La estadounidense es la gran artista del momento. Con infinidad de éxitos y trofeos a sus espaldas con tan solo 34 años, Swift se aventuró el pasado septiembre en una aventura ahora dentro del mundo de la NFL. Empezaron a surgir rumores de un posible romance entre la cantante y Kelce, actual tight end de Kansas y una leyenda en su posición, una historia que cobró forma con el paso de las semanas gracias a la estelar aparición de Taylor en todos y cada uno de los partidos de los Chiefs. Todo acabó cobrando sentido hasta día de hoy. Los Chiefs participarán en la Super Bowl LVIII de Las Vegas y ella no quiere perderse el partido más importante del año, más aún si 'su chico' puede coronarse con su tercer - y quien sabe si último - anillo de campeón.

Pero el calendario de la artista más grande del momento no perdona. Taylor tiene un concierto de su 'Eras Tour' el día 10 de febrero en Tokio, Japón, por lo que tendría que hacer una travesía si quiere estar el día siguiente en la capital de Nevada. Nada más finalizar su actuación, que suele alargarse hasta las tres horas y media, deberá subirse a un avión dirección Las Vegas con una duración aproximada de 12 horas. Pese a la odisea, el huso horario estará a su favor, y es que en la región norteamericana hay 17 horas menos que en el país oriental. Si no sucede ningún imprevisto, estará en su palco VIP - de más de un millón de dólares - para ver la actuación de los Chiefs de Kansas ante los 49ers de San Francisco.

Una pareja legendaria

Pese a que Swift se lleve las miradas de todos, Kelce es una eminencia también en su deporte. Más de una década dominando la NFL, dos títulos de campeón, múltiples selecciones a la Pro Bowl e infinidad de récords a sus espaldas, Travis es el gran escudero de Patrick Mahomes en Kansas, una pareja ya legendaria en el deporte y que puede instaurar una dinastía el próximo día 11 en Las Vegas