¿Por qué Marcelino le ha cambiado la cara al Villarreal?

Los resultados del Villarreal pueden parecer que han cambiado de la noche a la mañana, pero han tenido que pasar muchos entrenadores por el banquillo del Estadio de la Cerámica para que se diera esta circunstancia. Esta temporada, los 'groguets' estaban lejos de cumplir con las expectativas que había marcadas. La imagen que dejaba el equipo cada jornada, tanto con Quique Setién como Pacheta, no se correspondía al estatus que adquirió el club en los últimos años de la mano de Unai Emery.

Luces y sombras para un Villarreal ya clasificado

La posibilidad de incorporar a Marcelino García Toral, después de haber salido del Olympique de Marsella nada más iniciar la temporada, era una gran oportunidad para volver a consolidar un proyecto. Las tres victorias consecutivas (Zamora, Osasuna y Panathinaikos) que se han producido tras su llegada habrían reflotado la navegación de un submarino que estaba comenzando a navegar bajo una profundidad peligrosa.

Pese a ello, al conjunto amarillo le queda mucho camino por recorrer. "Llevamos tres partidos. Ocho días desde entonces. No es suficiente tiempo para hacer muchas valoraciones. En cambio, sí que podemos decir que estamos satisfechos. Con el juego, los resultados y también con la predisposición", declaraba el técnico asturiano después de clasificarse a los dieciseisavos de la Europa League.

Una de las claves del cambio está siendo la mentalidad de los jugadores. El propio Morales afirmaba que "estos partidos antes no los sacábamos", ya que durante los últimos minutos los griegos estuvieron a punto de empatar el encuentro.

Objetivo: dominar las áreas

Obviando el plus que ha significado en el aspecto mental la llegada de un nuevo entrenador, Marcelino también se ha visto con la obligación de poner, nuevamente, los cimientos de la casa. El conjunto amarillo estaba sufriendo mucho a nivel defensivo, dado que habían encajado 24 goles en 13 partidos de la Liga. Unos números que mantenían la diferencia de goles en negativo. Sin embargo, la recuperación de Juan Foyth y Alfonso Pedraza han sido dos elementos diferenciales para comenzar a cambiar esta dinámica.

Por otro lado, el rendimiento de José Luis Morales ha ampliado la amenaza ofensiva de los 'groguets', quienes habían perdido esta temporada a Chukwueze y Jackson. Dos jugadores que sumaban unas cifras que liberaban de responsabilidad a Gerard Moreno. Los seis goles anotados en estos tres partidos, ya le sitúan entre los máximos goleadores del equipo.

A partir de ahora, el objetivo del Villarreal es recuperar la regularidad en la competición doméstica. La duodécima posición no es el lugar que debe ocupar un equipo que aspira a estar, por lo menos, en puestos europeos.