Jordi Pujol recibe la insignia de oro y brillantes del Barça

El presidente Joan Laporta se la entregó junto a otros trece socios y socias que alcanzaron los 75 años como abonados

"Mientras yo sea presidente, el Barça seguirá siendo suyo, de sus hijos, de sus nietos y de sus bisnietos", dijo a los condecorados

Joan Laporta entregó la insignia de oro y brillantes del Barça a Jordi Pujol por ss 75 años como socio del club

Joan Laporta entregó la insignia de oro y brillantes del Barça a Jordi Pujol por ss 75 años como socio del club / FCB

SPORT.es

SPORT.es

En un día triste para el barcelonismo por la confirmación de la grave lesión de Gavi, el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha hecho entrega este lunes de la insignia de oro y brillantes a los 14 socios y socias que han cumplido 75 años como abonados de la entidad blaugrana, entre ellos el expresidente de la Generalitat de Catalunya Jordi Pujol.

En el acto, que se ha celebrado en el Auditori 1899 del Camp Nou, Laporta ha agradecido a estos socios su compromiso en un momento muy delicado para la entidad. No hay que olvidar que se hicieron socios durante la postguerra, una época en la que incluso llegó a peligrar la continuidad de la entidad.

"Se hicieron socios en una época de dificultades, en un país desmenuzado en plena posguerra. Les agradezco que, con ese gesto, adquirieran un profundo compromiso ético, social y democrático con el club y el país", agradeció un Laporta que reiteró su compromiso de mantener la actual propiedad del club, cien por cien de sus socios: "Si somos el mejor club del mundo, es gracias a ustedes. Mientras yo sea presidente, el Barça seguirá siendo suyo, de sus hijos, de sus nietos y de sus bisnietos".

Jordi Pujol ha explicado que fue en 1936 cuando vio el primer partido del Barça: "Una semifinal de la Copa, justo antes de que estallara la guerra civil". El expresidente de la Generalitat de Catalunya departió distendidamente con el máximo mandatario culé, que le recordó el momento en que Hristo Stoickov le hizo botar en el balcón de la Generalitat durante las celebraciones por el título de Copa del Rey de 1997.

Pujol reconoció que "el Barça me ha hecho sufrir mucho y también me ha dado muchas alegrías".