El dilema de Xavi en la sala de máquinas para París

Tal y como informamos ayer en SPORT, Frenkie de Jong está de vuelta. En el entrenamiento de ayer el neerlandés hizo parte con el grupo, confirmando que estará en plenas facultades para poder ser escogido por Xavi en el once de París. Por delante, cuatro sesiones completas, lo que nos hacen pensar que, si bien no al 100% por la falta de ritmo competitivo, sí será capaz de estar disponible si el técnico de Terrassa así lo considera oportuno.

Frenkie de Jong, OK: hizo parte del entreno con el grupo

A partir de aquí, seguramente una de las decisiones más complicadas para el preparador azulgrana de cara a esa ida de cuartos de final en el Parque de los Príncipes. Seguramente, nos atreveríamos a decir que la única duda porque el resto del once parece bastante 'cantado' salvo algún giro táctico que considere hacer el egarense. Ter Stegen bajo palos, Koundé, Araujo, Cubarsí, Cancelo en la línea de cuatro defensiva. Arriba, Lamine Yamal, Raphinha y Lewandowski.

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UNA POSICIÓN SOLO 'BAILARÍA'

En la sala de máquinas, Ilkay Gündogan tiene la plaza garantizada. Está en un gran momento y cada vez es más definitivo en 3/4 de campo. Christensen, baja de última hora en el Metropolitano por unas molestias en el Aquiles, a priori debería regresar. Y si está apto es titular seguro. El equipo ha ganado mucha consistencia con el danés de pivote. Desde ese 'reajuste' de Xavi se encaja mucho menos. Solidez, sería la palabra.

Entre Frenkie de Jong, Fermín y Sergi Roberto se jugarían la otra posición de interior. Por experiencia y visto lo visto los dos últimos compromisos, Roberto parece un pasito por delante de Fermín. A partir de ahí, tendrá que dirimir el entrenador del Barça si De Jong está listo para salir de inicio pese a esa inactividad.

LA 'GUARDIA PRETORIANA'

El neerlandés, hasta esa lesión sufrida ante el Athletic, era intocable para Xavi. Innegociable. Junto a Pedri, Gündogan y Gavi, la 'guardia pretoriana' el el centro del campo azulgrana. Una teórica formación de gala que apenas ha podido coincidir sobre el campo, por cierto.

Sin Frenkie, sin Pedri y sin Gavi se la jugaba el técnico de Terrassa ante el Nápoles y el Atlético en una semana determinante. Para la estabilidad económica y deportiva del club. Y tanto Fermín como Sergi Roberto, la segunda unidad, funcionaron genial. Dieron dinamismo, trabajaron. La puesta en escena del equipo con ellos en ambos compromisos fue intachable.

Y eso es lo que genera alguna duda para París. Esa conjunción entre la inactividad competitiva de Frenkie y la buena respuesta de esta fórmula en la sala de máquinas. Su gran decisión para el miércoles.