El ‘método Grimau' funciona

Con una tercera parte de la temporada prácticamente cumplida, el Barça de Roger Grimau está respondiendo a las expectativas creadas a pesar de tratarse un equipo configurado de nuevo, con cuatro flamantes fichajes y un entrenador por descubrir en la elite.

Y es que a pesar de la confianza depositada por la directiva blaugrana en el nuevo técnico, Roger Grimau, despertó algunas dudas en el entorno del equipo, pero la confianza que demostró el propio entrenador desde el primer día, y su nuevo equipo de ayudantes, fue el primer paso al éxito.

El mejor Laprovittola volvió ante el Maccabi

Un Grimau que tuvo que ganarse la confianza de los jugadores, en una nueva etapa donde dejaban atrás el trabajo de tres temporadas de Saras Jasikevicius, para tomar las riendas un técnico con un perfil completamente distinto.

Los más veteranos, con el entrenador

En una circunstancia de este tipo, era muy importante que los jugadores más veteranos del equipo creyeran en el nuevo entrenador, ya que quizá lo más fácil era relajarse después de la etapa de Saras, para entrar en una dinámica de un técnico sin experiencia en la élite.

Pero Grimau ha logrado lo más importante: ganarse muy pronto el respeto y la entrega del grupo de jugadores con más peso, que han acogido al técnico con los brazos abiertos y lo más importante, han arrimado el hombro para que el equipo haya respondido como lo ha hecho hasta ahora.

El estilo más tranquilo y afable de Grimau en contraposición al anterior entrenador, ha sido uno de los aspectos que mejor ha acogido la plantilla, y rápidamente le han arropado y la relación con el grupo es excelente, algo vital para que este equipo funcione como tal.

El técnico también ha mostrado sensibilidad con los jugadores que han contado con menos minutos de juego como Oriol Paulí, que salió motivado cuando el entrenador lo necesitó con la baja de Laprovittola, y rindió a un excelente nivel.

Evolución positiva del Barça

Y si los cuatro grandes fichajes han necesitado un tiempo para ir cogiendo la nueva dinámica, se puede decir que la evolución del equipo ha sido clara. Solo un lunar importante, la derrota en la pista del Baskonia donde el equipo no estuvo nada bien ni en juego ni actitud.

Aunque al equipo le vino bien como toque de atención y lo que más gustó al vestuario es que el técnico no cargó contra sus jugadores, más bien al contrario. “Creo más que nunca en este equipo” fueron las sorprendentes palabras de Grimau.

Además de Baskonia, derrotas ajustadas ante Valencia Basket y Murcia, y los tres duelos ante el Madrid, al que todavía no han podido ganar esta temporada, en un año brillante de los blancos que solo han perdido un encuentro esta temporada, son la asignatura pendiente.

De momento, el equipo está ofreciendo una buena imagen, trabajando en defensa y logrando anotar muchos puntos con la ‘artillería’ que cuenta Grimau. Aunque como decía Kalinic en una reciente entrevista en SPORT. “Los resultados deben llegar a final de temporada y entonces podremos valorar la llegada de Grimau y su nuevo estilo que rompe con el anterior”. Pues a esperar un poco.