Audi presenta el nuevo Q8, digitalización más que diseño

Audi estrena cara para la familia Q, su saga de SUV, el segmento de moda. Y lo hace ofreciendo un modelo que hereda la sapiencia obtenida en el desarrollo de los Premium y añade un punto rebelde a su diseño. Se trata del Q8. Por dimensiones en un SUV pero por diseño es un CUV. O sea, espacio interior muy amplio y a su vez un diseño más cupé y deportivo. Listo para entrar a la guerra con sus rivales más directos, por llamarlos de alguna manera: el BMW X6 y el Mercedes-Benz GLE Coupé.

Mide casi 5 metros de largo (4,986 metros para ser exactos) y es algo más corto del modelo que tiene por encima, el Audi Q7. También es más bajo (66 milímetros) aunque es más ancho (27 milímetros). Con ello ofrece unas características distintas al perfil de usuario que tiene su hermano mayor. Dispone del espacio de un SUV grande pero con solo dos filas de asientos y presenta una silueta más deportiva con puertas sin marco (algo que lo hace ser más pesado porque éstas son más rígidas). También gana peso por disponer de un mayor equipamiento de serie y ruedas de mayor diámetro.

NUEVA IMAGEN FRONTAL

Aporta una parrilla novedosa que será la nueva firma visual de la gama Q de Audi, con un diseño octogonal y seis varillas entrecruzadas. El capó está muy musculado y en la línea lateral de cintura se aprecian dos grandes blisters, uno que viene de la zona delantera y otra que se funde con una línea horizontal de luces led rojas que completa todo el espacio trasero. Al no tener marco en las puertas gana mucha luminosidad.

Las plazas traseras son muy amplias y el maletero ofrece 605 litros de capacidad, un volumen que se puede aumentar ya que la banqueta trasera es corredera (100 milímetros), permitiendo aumentar 75 litros más.

Aunque más allá de su estilo por fuera, dónde hay que ver su mejor faceta es por dentro. Como nos comentaba en la presentación del modelo en Shenzen (China) Fermín Soneira, responsable de producto de Audi “el interior es una auténtica revolución tecnológica. La conectividad ofrece un papel fundamental”, y la prueba está en que durante su puesta de largo el público chino interactuaba y se hacía más fotos dentro del coche que fuera. “Creemos que será un modelo que tire mucho en todo el mundo, pero especialmente aquí en China.

CARGA TECNOLÓGICA

El nuevo concepto digital de la instrumentación se basa en el Audi A8, con todo su arsenal tecnológico y su pantalla de 12 pulgadas (que puede ofrecer dos vistas, clásica o navegación). Ofrece el sistema MMI navigation plus de control, con un toque de inteligencia artificial que permite recomendar recorridos preferidos basados en viajes previos.

El Audi Q8 evoluciona con el mercado y con los gustos del consumidor, aportando ese toque más racing, lo que nos obliga a pensar que además de las tres motorizaciones de inicio (dos diesel y una de gasolina) habrá versiones más potentes S y RS. De hecho algunos de los prototipos que vimos en su día montaban ese tipo de especificaciones más deportivas. No hacerlos sería raro.

MICROHIBRIDACIÓN

La gama de motores que Audi pondrá en escena en su lanzamiento europeo (que será allá por el mes de julio) serán como hemos apuntado dos diesel y uno de gasolina, destacando el 3.0 TDi de 286 CV. También ofrece el TDi de 227 CV y el 3.0 TFSi de 335 CV. Está prevista la incorporación en todas sus versiones de una microhibridación (MHEV) con baterías de iones de litio dde 48 voltios que asisten al sistema eléctrico primario, permitiendo al vehículo rodar con el motor parado entre 55 y 160 km/h, recargándose en las frenadas y en la deceleración lo que supone un ahorro de unos 0,7 litros cada 100 kilómetros. En un futuro podría llevar un sistema híbrido enchufable como ya sucede con su hermano de plataforma, el Porsche Cayenne. Todas las versiones serán 4x4 asociadas a cambios automáticos.

La marca todavía no ha desvelado su precio, pero teniendo en cuenta que será un poco más caro que el Q7 (precio de partida en 63.690 euros) pero en la línea de los BMW X6 (desde 75.400 euros) o Mercedes GLE cupé (desde 79,475 euros) para poderlos combatir.