El City sobrevive a Anfield en el último baile entre Guardiola y Klopp

Liverpool y Manchester City firmaron las tablas en un encuentro especial que bajó el telón de la histórica rivalidad entre Pep Guardiola y Jürgen Klopp

De Bruyne juega a otra cosa en Anfield

English Premier League - Liverpool vs Manchester City

English Premier League - Liverpool vs Manchester City

Alguer Tulleuda Bonifacio

Alguer Tulleuda Bonifacio

Era una auténtica batalla campal. Un último baile entre dos entrenadores que han cambiado la historia de este deporte. Un duelo decisivo para el devenir de la Premier League. Con tantos factores que rodeaban esta auténtica final, Liverpool y Manchester City regalaron un auténtico partidazo donde firmaron las tablas con justicia. El campeonato liguero sigue más vivo que nunca.

Anfield se vestía de gala para bajar el telón de la histórica rivalidad entre Pep Guardiola y Jürgen Klopp, un último duelo entre dos entrenadores que han cambiado este deporte para siempre. En un encuentro decisivo para las aspiraciones de ambos en la Premier League, conseguir salir vencedor de esta batalla se traducía en un auténtico golpe encima de la mesa en el campeonato liguero. El partido se presentaba con todos los mejores alicientes posibles.

La disputa por la Premier League arrancó con una intensidad asfixiante que se confirmó como la tónica dominante durante todo el encuentro. El intercambio de golpes inicial acabó en una eléctrica transición que terminó rematando Darwin Núñez para abrir el marcador para el Liverpool. El delantero recibió un pase preciso de Luis Díaz que, para desgracia de los 'reds', se encontraba adelantado cuando recibió el balón. Un primer aviso para un Manchester City que despertó del aviso inicial.

Kevin De Bruyne juega a otra cosa

De Bruyne juega a otra cosa en Anfield

De Bruyne juega a otra cosa en Anfield / Agencias

Lo hicieron gracias a un Kevin De Bruyne que sigue empeñado en conquistar el campeonato liguero para su equipo. El mediapunta belga, que parece jugar a un deporte distinto a los demás, empezó a cargar con todo el peso de su equipo en ataque. Se inventó una magistral asistencia minutos después tras un saque de esquina al primer palo que acabó empujando Stones a placer (0-1). Una acción que solamente imaginó su prodigiosa cabeza para adelantar a su equipo en el marcador.

El Liverpool, que se dejó llevar por un Anfield incansable con los suyos, empezó a acumular ocasiones sin cesar después del varapalo inicial. No consiguieron empatar el encuentro antes del descanso, aunque el dominio local hacía presagiar la igualada más pronto que tarde. Lo consiguieron justo en el arranque de la segunda mitad; un garrafal error de Nathan Aké en un pase atrás hacia Ederson lo acabó cazando Darwin, que chocó con Ederson para provocar la pena máxima. Mac Allister no desaprovechó la oportunidad con un soberbio lanzamiento a la escuadra que igualó el encuentro (1-1). El portero brasileño tuvo que retirarse minutos después, incapaz de continuar después de la colisión con el ariete uruguayo.

Ederson, lesionado ante el Liverpool

Ederson, lesionado ante el Liverpool / LAP

El faraón Salah cambia el partido

Jürgen Klopp aprovechó el subidón tras el tanto del empate para dar entrada a su pieza más preciada. Salah acabó de decantar el partido para el Liverpool, que se volcó al ataque en busca de la victoria. El Manchester City acusó la presión de Anfield, que ejercía una fuerza aplastante contra los ciudadanos. Guardiola se protegió cambiando a Kevin De Bruyne, que tuvo una disputa con el técnico de Sampedor tras no entender su sustitución.

En el enésimo cambio de rumbo del partido, el Manchester City consiguió reaccionar contra todo pronóstico. Primero fue Foden, que remató sin querer un balón al poste, después Doku hizo diabluras por banda para acabar enviando el esférico a la madera. La falta de acierto acabó penalizando a los campeones, que replegaron atrás en los últimos minutos con un Liverpool que buscaba la épica. Un penalti no pitado a Mac Allister que reclamó Anfield con fervor acabó de cerrar un encuentro magistral. El ganador del partido acabó siendo el Arsenal, que cierra la jornada liderando en solitario. Un auténtico partidazo para bajar el telón de una histórica rivalidad.