De Messi a Joao Félix, la foto de la situación

Joan Laporta, el día de su toma de posesión como presidente del FC Barcelona

Joan Laporta, el día de su toma de posesión como presidente del FC Barcelona / Javi Ferrándiz

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

La encuesta de nuestro diario sobre los tres años de mandato de Joan Laporta no deja lugar a la duda: el Barça no está mejor que en 2021. Suspenso a la gestión del presidente y dos sentencias deportivas que marcan con mucha precisión la situación del club: la peor decisión y el mejor fichaje. La primera, por supuesto, la salida de Messi. La segunda, la percepción de que el mejor fichaje ha sido Aubameyang, un jugador que vino como parche de última hora y duró siete meses en el club, aunque dejó doce millones en caja.

Son dos cuestiones importantes. Se deja ir a Messi en una decisión nunca bien explicada y resulta que el sustituto que más complace a los socios es un jugador fichado de urgencia. Si esto va de Messi a Aubameyang, es la historia de un fiasco. Pero si va de Messi a Lewandowski, que es lo que debería, la afición tampoco traga; no entiende la decisión de perder a Messi para pagar 45 millones por un jugador solo un año más joven que Leo. El cortoplacismo es evidente.

Y siguiendo con Messi, una reflexión final que acaso es la foto de la realidad del Barça actual: se ha pasado de Messi a Joao Félix como objeto de deseo. Del mejor futbolista de todos los tiempos, a un descarte del Atlético al que sin haber hecho méritos hasta ahora para seguir, se quiere renovar su ¡cesión! a toda costa. El drama es que no se puede aspirar a más. La crisis económica ha condenado al equipo a sufrir situaciones límite que le lastran, pero no toda la culpa es de la falta de dinero, pues se ha conseguido a base de palancas que se pagarán muy caras y el equipo no ha salido reforzado.