Purdy lidera a los 49ers hacia los playoffs. ¿Hasta dónde llegará?

En el Thursday Night Football que abría la decimoquinta semana de competición en la NFL, los 49ers vencieron a Seahwaks por 21-13 en un duelo divisional de vital importancia para ambas franquicias.

Con un balance positivo de 10 - 4, los de San Francisco ya han asegurado el liderato de la NFC Oeste y su puesto en los playoffs está certificado, una situación que ha sido posible gracias, en parte, a la aparición de un héroe inesperado al que llaman “Mr Irrelevant”. ¿Por qué?

LAS LESIONES 'MALDITAS' EN EL QUARTERBACK

A inicios del mes de diciembre todo eran alegrías en San Francisco 49ers: el equipo ganaba a rivales de entidad con un juego de ataque imprevisible y una unidad defensiva que se colocaba como la número uno en toda la NFL. Pero en esta competición todo cambia en un instante.

En el partido ante Miami Dolphins el pasado día 4, Jimmy Garoppolo, quarterback titular del equipo de la Bahía cayó lesionado y se confirmaron los peores pronósticos: su rotura en el pie izquierdo impediría al mariscal de campo acabar la temporada con su equipo, dejando un mar de dudas a poco más de un mes para el inicio de la postemporada.

En 49ers ya se esperaban lo peor. Aunque la defensa fuese la mejor y el peso de Garoppolo en esa ofensiva no sea omnipresente, los de San Francisco sentían que sus opciones al anillo se desvanecían considerablemente.

En tan solo 3 meses, la franquicia había perdido su primer y segundo quarterback, después de que el pasado septiembre cayera lesionado también para todo el año Trey Lance, la gran promesa de este equipo en la posición de pasador.

¿Quién podía rescatar a San Francisco en esta situación? Sin duda, nadie esperaba que fuese Brock Purdy. El novato fue seleccionado en la última (!) posición del draft de 2022, en el puesto 262, una selección que es prácticamente testimonial para el jugador elegido y que, en la mayoría de ocasiones, es cortado por el equipo al poco tiempo. No ha sido el caso para “Mr Irrelevant”.

PURDY NO QUIERE SER IRRELEVANTE

Purdy salió al Levi’s Stadium y realizó sus primeros snaps ante unos Dolphins que eran uno de los mejores equipos de toda la NFL. Eso no parecía motivo de nerviosismo para Brock, ya que completó 25 pases para 210 yardas y dos touchdowns en sus primeros minutos como profesional de fútbol americano.

La realidad es que el ex de Iowa State ha demostrado ser más que un jugador testimonial en sus tres partidos al mando de la ofensiva californiana. Ante tres rivales de entidad como Miami, Tampa y Seattle, Purdy acumula seis pases de touchdown y tan sólo una intercepción.

Las sensaciones que transmite Brock son las de un jugador que estaba más que preparado para recibir una oportunidad, y lo está demostrando jornada tras jornada. La realidad es que está en el ecosistema ideal para cualquier jugador de futbol americano que quiera subir sus prestaciones.

Kyle Shanahan es una de las mentes ofensivas más ingeniosas de toda la NFL y es capaz de idear un sistema de juego capaz de arropar a la perfección a su quarterback. Tal y como ha hecho con Garoppolo, el head coach elige con precisión cuándo su quarterback debe pasar o cuándo debe ser la carrera quien lidere esa unidad.

Jugadores como McCaffrey, Ayuk, Samuel o Kittle son claves para que Purdy sienta que no tiene toda la responsabilidad del ataque en sus hombros, y esto provoca que el quarterback se encuentre muy cómodo en el césped.

Más allá de un excelente playbook, el rookie ha demostrado ser más que un quarterback de sistema. Purdy está siendo capaz de pasar en situaciones de scramble o encontrar a sus jugadores en la zona profunda.

La estadística así lo confirma: Tras el partido ante Tampa, Brock convirtió el primer touchdown de pase por fuera de los números lanzado por un quarterback de 49ers esta temporada. Además, ante Buccaneers sumó los mismos lanzamientos de touchdown por fuera de los números (2) que Jimmy Garoppolo en las pasadas tres temporadas.

Estos datos arrojan optimismo a la ofensiva de Shanahan, que ven en “Mr Irrelevant” un jugador capaz de ir más allá de las primeras lecturas o los pases cortos, una situación a la que recorren la gran mayoría de novatos en sus primeros pasos en la liga.

Ante Seahawks, Purdy volvió a pasar sin cometer ningún error de bulto. Sus 217 yardas aéreas, dos touchdowns y ninguna intercepción le valieron a San Francisco para imponerse a su principal competidor de la división y asegurar la primera plaza ante uno de los equipos revelación de este año.

En un ambiente hostil como es Seattle, el novato no tuvo miedo de pasar en zonas comprometidas del campo, rebosando una confianza en si mismo que no es habitual, más aun en un equipo que aspira a llegar a la Superbowl y hacerse con el anillo de campeón.

En el Thursday Nitgh Football, Purdy continuó con su más que correcto nivel de forma, y nos dejó con algunas jugadas de categoría y que no son habituales en un último pick de draft. En una situación de 2a y 8 para 49ers a finales del primer cuarto, el quarterback recibió el snap y amagó hasta en dos ocasiones el pase a la zona flat a sus dos runningbacks.

Tras engañar a la defensa, creó espacio en la zona intermedia donde conectó un pase con George Kittle, Tight End del equipo, que se encargaría de superar a sus rivales en carrera y convertir un touchdown. Purdy es disciplinado, pero también tiene carácter para sorprender a las defensivas rivales, y aquí, vuelve loco a los linebackers de Seattle.

“Lleva entrenando toda la temporada contra la mejor defensa de toda la NFL. Está más que preparado” declaró Warner, el alma defensiva de San Francisco.

Los números y las sensaciones en Brock Purdy van de la mano hasta el momento pero Kyle Shanahan deberá seguir haciendo magia desde la línea de banda en el playcalling si quiere que su equipo llegue a postemporada como claro aspirante a todo. 

“Mr Irrelevant” parece haberse convertido en un jugador más que relevante, pero deberá buscar la fórmula para seguir con este nivel en el mes de enero, una época del año en donde un error o cualquier despiste en ataque puede hacer que tu equipo se vaya a casa más temprano de lo esperado.