España abre su medallero de la natación en el debut de Belmonte

España ha logrado su primera medalla en las pruebas de natación de los Europeos de Londres tras colgarse este jueves la medalla de plata en la prueba de relevos de 4x200 femenino. Ha sido una excelente jornada para el equipo español, que vio cómo Judit Ignacio en 100 mariposa y Carlos Peralta en 200 mariposa establecieron dos nuevas plusmarcas nacionales.

Esos éxitos no eclipsaron la excepcional actuación de la húngara Katinka Hosszu, la auténtica reina de estos campeonatos, que sumó su quinta medalla en la capital británica tras alzarse hoy con el oro en 200 estilos y en 4x200 libres, así como la plata en 100 espalda.

Un medallero en el que España logró inscribir su nombre gracias a la actuación del cuarteto formado por Melani Costa, Patricia Castro, Fátima Gallardo y Mireia Belmonte, que lograron la medalla de plata en la final del 4x200 con un registro de 7:53.38 minutos.

Esta marca pone al relevo español con más de pie y medio en los Juegos de Río, ya que se sitúa en la tercera posición del ranking mundial que otorga los cuatro últimos billetes para la cita olímpica.

No obstante, España deberá esperar hasta el 31 de mayo, cuando la Federación Internacional haga oficial la identidad de los 16 participantes en Río para festejar un billete olímpico que parece imposible que nadie pueda arrebatar a las españolas.

La plata del 4x200 no fue la única alegría de la jornada para el conjunto español en el que Judit Ignacio logró un puesto en la final de los 100 mariposa tras establecer con una marca de 58.73 un nuevo récord de España.

Ignacio, que logró la octava mejor marca de todas las participantes en las semifinales, rebajó en 14 centésimas la anterior plusmarca que ella misma poseía desde los Mundiales de Barcelona 2013 con un crono de 58.87 segundos.

También mejoró su plusmarca nacional en 200 mariposa el malagueño Carlos Peralta, tras concluir quinto en la final del Europeo con 1:56.42, 15 centésimas menos que la plusmarca (1:56.57) que él mismo había establecido el pasado mes de diciembre en Amsterdam.

Por su parte, Jessica Vall, bronce en los pasados Mundiales de Kazán, logró clasificarse para la final de los 200 braza con la quinta mejor marca de todas las participantes en las semifinales (2:24.56).

Esta brillante actuación permite a Vall, que cuenta como mejor marca con los 2:22.76 que estableció el pasado año en los Mundiales de Kazán como nuevo récord de España, soñar con mejorar en la final de mañana la medalla de bronce que logró hace dos años en los Europeos de Berlín.

Ese bronce se le escapó por tan solo 93 centésimas a María Vilas en la final de los 800 metros, en la que la gallega concluyó cuarta con un tiempo de 8:26.61. Una decepción que Vilas vio compensada con la consecución de su segundo billete para Río, tras el logrado el pasado mes de marzo en Sabadell en los 400 estilos, después de rebajar este jueves el tiempo logrado en las preliminares por Jimena Pérez (8:31.19), que tuvo que conformarse con la sexta plaza en la final.

Finales que la húngara Katinka Hosszu casi cuenta por victorias, tras añadir a los oros logrados el lunes en 400 estilos y el martes en 200 espalda, los triunfos cosechados en 200 estilos y en el relevo 4x200.

Una sucesión de triunfos de la magiar que sólo se vio truncada por la derrota sufrida en 100 espalda, donde 'sólo' pudo ser plata por detrás de la danesa Mie Oe Nielsen en una final que Hosszu disputó unos segundos después de bajarse de lo alto del podio en la prueba corta de estilos.

Sus éxitos catapultaron en el medallero a Hungría, que además de los tres metales logrados por la 'dama de hierro', sumó otros dos títulos más gracias los triunfos de Boglarka Kapas en 800 libre (8:21.40) y de Laszlo Cesh en 200 mariposa (1:52.91).

Tampoco falló el francés Camille Lacourt, que tras alzarse el martes con el oro en 100 espalda, se ha impuesto en esta cuarta jornada de la natación en 50 espalda con 24.77, por delante del húngaro Richard Bohus (plata) y del ruso Grigory Tarasevich (bronce).

Por su parte, el británico Ross Murdoch se resarció de su ausencia en los próximos Juegos de Río con la consecución del oro en 200 braza en una emocionante final en la que con 2:08.33 superó por sólo siete centésimas al vigente campeón mundial, el alemán Marco Koch (plata).