Qatar fue un infierno para los pilotos: "Volvamos en diciembre, no en octubre"

El calor sofocante dejó a varios pilotos al límite, con síntomas de deshidratación y desmayos tras la carrera

Ocon vomitó dos veces en el coche y Sargeant se bajó tras 41 vueltas completamente extenuado

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Sargeant ha tenido que ser socorrido por los miembros de Williams tras abandonar

Sargeant ha tenido que ser socorrido por los miembros de Williams tras abandonar / Williams

Laura López Albiac

Laura López Albiac

El Gran Premio de Qatar de Fórmula 1 fue una auténtica pesadilla para los pilotos, que acabaron extenuados por el calor sofocante, habitual en octubre en el país del golfo pérsico. El viento suavizó las condiciones en las jornadas de viernes y sábado, pero el domingo desapareció y dio paso a un altísimo grado de humedad, del 80%, con casi 40 grados de sensación térmica a la hora de la carrera. Ello provocó algunos desfallecimientos, visitas a la enfermería del circuito de Losail tras la carrera e incluso la inusual imagen del trío del podio, Verstappen, Piastri y Norris, tendidos en el suelo y completamente destruídos a la espera de la ceremonia de premiación.

El que peor lo pasó fue el estadounidense Logan Sargeant, que llegó a Qatar convaleciente de un proceso gripal y en plena carrera, tras 41 vueltas, tuvo que pedir permiso a su equipo para abandonar. No podía más. "Tranquilo, no pasa nada", le dijeron desde el muro. Cuando llegó al box de Williams presentaba síntomas de deshidratación y varios miembros del equipo tuvieron que ayudarle a bajar del coche.

Antes de eso, Fernando Alonso advirtió por la radio que su asiento estaba ardiendo y pidió al equipo que le echasen agua al interior del coche cuando hiciera su parada. George Russell se levantaba la visera en su pit stop buscando el aire y sacaba las manos por encima del volante en la recta de meta para tratar de ventilarse.

Al final de las 57 vueltas de carrera, Alex Albon y Lance Stroll fueron directos el centro médico por temor a sufrir un golpe de calor. El canadiense fue evacuado en ambulancia. Y Esteban Ocon desveló que "en la vuelta 15 o 16 he vomitado y he pensado: '¡Mierda, esto se va a hacer ser largo!”.

“Nunca me había pasado. Siempre he podido hacer dos distancias de carrera en el coche, para eso entreno. Pero hoy entre el aire caliente y el calor que desprende el motor debía haber una temperatura de 80 grados dentro del coche”, explicó el de Alpine.

George Russell acabó desfondado: "Nunca había experimentado nada similar en una carrera, ni siquiera entrenando, pensaba que me iba a desmayar. Quería salir y así me he sentido desde la vuelta 20. Unas vueltas más y me habría tenido que retirar”, reconoció el piloto británico, cuarto al final.

Según Lando Norris, varios pilotos se desmayado al llegar a la clínica del circuito: "Ha sido una carrera al límite para el cuerpo humano", denunció.

Algunos, como Leclerc, insinuaron que de repetirse estas condiciones en otra ocasión, podrían plantarse velando por su seguridad. Fernando Alonso instó a reflexionar para evitar este tipo de esfuerzo tan extremo: "Tenemos que pensar en el futuro: temperaturas máximas o humedad máxima... En el fútbol tienen pausas para tomar agua, pero nosotros no podemos tener eso, ¿verdad?", comentó. La consigna de todos en la parrilla era clara: "Volvamos en diciembre, no en octubre".

Qatar tiene contrato con la Fórmula 1 hasta 2032. En 2021, la primera edición se celebró a finales de noviembre y aunque el calor fue también protagonista, no se llegó a una situación tan límite. De cara a la próxima temporada, la carrera está prevista para el 1 de diciembre, por lo que se espera que las condiciones sean mejores.