Rossi, entre algodones, en Italia

Valentino Rossi no participará este jueves en la rueda de prensa previa al Gran Premio de Italia, ni en ningún evento organizado por sus patrocinadores. Los médicos le han aconsejado guardar reposo absoluto antes de subirse el viernes a la moto. Eso sí, parece ser que sí atenderá a los medios en el hospitality de Yamaha a su llegada a Mugello. 

El italiano, que junto a Maverick Viñales, Dani Pedrosa, Andrea Dovizioso y Johann Zarco estaba incluído la rueda de prensa oficial del GP de Italia, será finalmente sustituido por Andrea Iannone. El mismo jueves, Rossi deberá pasar un primer control médico y después atenderá la prensa pero evitará la comparecencia oficial.

Valentino espera recibir el OK de los doctores para subirse el viernes a la Yamaha M1 en la primera sesión de ensayos libres y asegura que será entonces cuando podra hacer

una valoración definitiva de su estado físico y decidir si participa finalmente en la carrera.

Valentino se recupera de las lesiones a nivel torácico-abdominal que sufrió el jueves de la pasada semana en un accidente de motocross y que le llevaron a ingresar una noche en el hospital de Rimini, de donde fue dado de alta el viernes por la tarde.

El piloto de Yamaha no quiere perderse una de las citas más importantes del calendario para él, aunque según explica, todavía siente fuertes dolores en el hígado y el riñón, circunstancia que impide dar por segura su participación.

"No será fácil estar aquí", ha declarado Rossi a La Gazzetta dello Sport. "Desgraciamente, me hice daño haciendo motocross, el dolor en mi abdomen y el pecho es todavía intenso. Lo bueno es que voy mejorando día a día y eso me hace ser optimista para la prueba en Mugello. Una cosa es segura: voy a hacer todo lo posible para correr la carrera de casa".

Tras caerse hace dos semanas en Le Mans, cuando peleaba por la victoria con <strong>Viñales</strong>, Rossi perdió el liderato y ahora marcha tercero, a 23 puntos de su compañero y líder del campeonato.