Así puedes descubrir rápidamente si hay cerca un coche camuflado de la DGT

Seguramente, alguna vez te habrás preguntado si alguno de los vehículos que circulan por la carretera pertenecen a la DGT o la Guardia Civil, por ejemplo. Por lo tanto, en este post te vamos a contar algunos trucos para averiguar si estos pertenecen a alguna de las autoridades mencionadas, además de comentarte también un truco para saber que no lo son, lo que nos permitirá continuar nuestra marcha sin ningún tipo de problema.

En varias ocasiones podemos ver como hay algunos radares móviles ocultos en zonas en las que no suele producirse accidentes, por lo que ahí es donde algunos vehículos aprovechan para ir más rápidos del límite permitido. Por supuesto, al final esta medida se realiza con un objetivo claro, el recaudatorio.

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Ahora bien, entrando en materia y hablando de esos coches infiltrados que vigilan las carreteras con el fin de impartir multas, por así decirlo, y aunque es complicado saberlo, parece que estos vehículos podrían ser Alfa Romeo Stelvio y Seat Exeo. Sin embargo, se ha sabido que muchas veces la propia Guardia Civil usa coches que ha incautado y posteriormente adaptado. Por otro lado, también se suele comentar que la Guardia Civil no solo usa coches para esta misión, puesto que estos cuentan con 34 motos, 14 furgonetas y 2 camiones para funciones de vehículos camuflados. De esta manera se hace muy complicado identificar si son o no.

Por lo tanto, puede que estos tres trucos te vayan de maravilla para poder identificarlos, aunque cabe mencionar que estos solo te pueden servir si la propia Guardia Civil se presta a ello. Veamos en qué consisten estos trucos:

• El primero es localizar las iniciales “PGC” en su placa de la matrícula, siglas que representan el “Parque de la Guardia Civil”, lo que propiamente te indica ya que son ellos.
• El segundo es bastante obvio, aunque cabe tener en cuenta que solo podrás darte cuenta de ello cuando hayas rebasado a dicho coche o tengas la oportunidad de verlo ya sea lateralmente o de frente. Como no podía ser de otra manera, se trata de ver si los ocupantes del coche (normalmente dos) llevan el chaleco reflectante puesto. Esto lo hacen por si deben salir del coche para realizar alguna intervención, no tardar en identificarse.
• El tercero es más bien un truco para descartar que son y es el hecho de si la matrícula lleva un babero (pequeño accesorio incluido en la matrícula que demuestra el concesionario en el que se ha comprado), que especialmente se ven en coches comprados de segunda mano. Por lo tanto, si ese es el caso, podemos afirmar que no es un vehículo de la Guardia Civil, ya que cuando los adquieren, aunque no les pongan la matrícula de PGC, sí se encargan de quitar toda esta clase de distintivos.

Ahora bien, aunque esperamos que todo esto te haya servido, ten en cuenta que poca cosa podrás hacer para combatir esta táctica de la policía. Lo único que te podemos recomendar es que, si tienes una mínima sospecha de que alguno de los coches que hay en carretera pueda ser de la Guardia Civil, no lo rebases a mayor velocidad de la permitida ni realices ninguna acción prohibida.