Francia afianza el liderato tras una sufrida victoria ante Grecia

El combinado 'bleu' resolvió el partido desde los once metros por mediación de Mbappé

Griezmann terminó sangrando tras recibir una salvaje patada de Mavropanos en el rostro

Mbappé celebra junto a sus compañeros el gol de la victoria de Francia

Mbappé celebra junto a sus compañeros el gol de la victoria de Francia / AFP

Alberto Teruel

Francia sangró y sudó, pero su partido no terminó en lágrimas. El combinado 'bleu' logró una sufrida victoria ante Grecia, que llegaba al Stade de France como principal contendiente en la lucha por el liderato. Acostumbrados a un camino de rosas hasta la fecha (con el asterisco de Irlanda), los pupilos de Deschamps, frustrados por la sólida defensa helénica y un sensacional Vlachodimos, tuvieron que resolver el partido con una pena máxima materializada por Mbappé.

Francia-Grecia 19/06

Eurocopa Fase Clasificatoria

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Alineaciones
Francia
Maignan; Koundé, Konaté, Upamecano, Theo Hernández; Tchouaméni, Camavinga; Coman (Dembélé, 77'), Griezmann (Nkunku, 85'), Mbappé; Kolo Muani (Giroud, 85')
Grecia
Vlachodimos; Baldock, Mavropanos, Hatzidiakos, Tsimikas; Siopis (Fountas, 66'), Kourbelis (Bouchalakis, 86'); Masouras (Koulierakis, 71'), Bakasetas (Retsos, 71'), Mantalos, Giakoumakis (Pavlidis, 66').

Sabía Francia que ante los helénicos no bastaría con jugar a medio gas como el día de Gibraltar, por lo que se vació en busca del tanto inaugural. Mbappé comandó la ofensiva 'bleu', llegando a reclamar penalti hasta en tres ocasiones. Las tres fueron negadas por Mateu Lahoz, siendo la zancadilla de Baldock la más discutible.

Pese a su innegable protagonismo en ataque, la mejor ocasión de la primera parte no nació de las botas del capitán francés. Al filo del descanso, Jules Koundé se plantó en el área en situación de mano a mano. Su intento iba muy bien colocado, pero fue frustrado por una mano sensacional de Vlachodimos.

Tras el paso por vestuarios, Francia terminó encontrando el penalti que tanto había buscado. Este llegó tras una salvaje entrada de Mavropanos, que propinó una patada en el rostro a Griezmann, dejando al 'Principito' sangrando y con un aparatoso vendaje en el rostro. El encargado de convertir la pena máxima fue Mbappé, pero se encontró con otra sensacional intervención de Vlachodimos.

De poco sirvió la estirada del guardameta del Benfica, pues se adelantó ligeramente y el penalti tuvo que ser repetido. A la segunda ya no perdonaría Mbappé, que cambió la dirección del lanzamiento para materializar el primer tanto del partido.

Mavropanos terminó poniendo la guinda a su fatídica noche poco después. El central del Stuttgart, ya amonestado por el penalti sobre Griezmann, terminó viendo la roja directa tras derribar a Kolo Muani cuando ya se plantaba solo ante el portero. A punto estuvo Griezmann de sacar oro de ese lanzamiento de falta, pero su intento se perdió por encima del travesaño.

Con la intención de aprovechar la superioridad numérica y cerrar el partido lo antes posible, Deschamps introdujo más pólvora desde el banquillo. Uno de los elegidos fue Dembélé, que salió con ganas de devorar el campo. El extremo azulgrana se convirtió en un quebradero de cabeza para Tsimikas y Hatzidiakos y, tras varias internadas peligrosas, se quedó a escasos centímetros de apuntarse un tanto en su casillero particular.