Quique Sánchez Flores entiende las protestas de la afición

Mazazo inesperado. Quique Sánchez Flores supo reaccionar a la derrota, a la situación del equipo en la clasificación y a las primeras críticas (vía protestas) de la afición en contra de su figura.

“La sensación que nos queda es de frustración. Volvemos a tiempos de inicios de la pasada temporada. Ante situaciones complicadas, nos falta tranquilidad y frialdad”, señaló. Quique no dudó en explicar que “ahora con poco nos hacen gol y nosotros necesitamos mucho. La ansiedad nos hace ser un equipo más débil”. 

El técnico escuchó las primeras protestas de un sector de los aficionados, que gritaron 'Quique vete ya!. “Es difícil ser del Espanyol. Y venir al campo. Cuando el equipo no rinde, la afición se rebela y reacciona. Me parece correcto. Prefiero una afición rebelde e inconformista que una que no reaccione”, señaló.

Eso sí, añadió que “mejor que centren la carga en la espalda del entrenador que en la de los jugadores, que los necesitamos frescos”. Quique recordó, no obstante, que “es el mismo entrenador de la pasada temporada”. Todo un aviso.

No quiso hablar de un posible cese, que no lo habrá ya que el presidente Chen suele ser muy analítico en estas circunstancias como ya demostró en el pasado, pero desveló que “en verano tomé la decisión de quedarme y hay que ser honesto y asumir las situaciones. Toca ser fuertes”. El ciclo del preparador cada vez tiene síntomas de que concluirá a final de temporada.