Savinho también hace magia en la Copa

El Girona se clasifica para la segunda eliminatoria gracias a un golazo del brasileño en el último minuto de partido

Los de Míchel sufrieron más de la cuenta ante el San Roque de Lepe en un campo impracticable

El Girona, en la Copa del Rey

El Girona, en la Copa del Rey / @GironaFC

Tatiana Pérez

Sufriendo más de la cuenta. Pero trabajo hecho. El Girona tuvo que esperar hasta el último minuto del partido para decidir la eliminatoria contra el San Roque de Lepe (1-2). Un golazo de Savinho en el 98’ permitió a los de Míchel deshacer el empate en el marcador, después de que Mizzian hubiera igualado en tres minutos la primera diana de Valery, y avanzar de ronda en la Copa del Rey. El brasileño también hace magia en la competición del KO y puede convertir en oro cada pelota que toca, incluso en un campo impracticable como el que se encontraron este miércoles los rojiblancos en el Ciudad de Lepe.

Una de las principales preocupaciones del Girona era cómo se encontraría el terreno de juego. Un fuerte temporal malogró el estadio y el club andaluz poca cosa pudo hacer para arreglar el césped. El campo estaba impracticable. Con el peligro que eso conlleva con relación a las lesiones.

Por primera vez en la Copa, Míchel apostó por un once formado única y exclusivamente por jugadores del primer equipo, dejando a Selvi, Almena y Antal en el banquillo. Así pues, con Fuidias en la portería, Arnau, Bernardo, Juanpe y Miguel se situaron en la línea defensiva; Kébé y Solís, en un medio del campo muy físico; y Tsygankov, Portu y Valery en la zona de ataque con Stuani como gran referencia.

Al Girona le costó entrar al partido, y no por tenerse que enfrentar a un rival de Segunda RFEF. El campo estaba blando, lleno de hoyos, con agua acumulada en varios sectores y el césped demasiado alto. Eso provocó que la pelota no corriese suficiente como para que los de Míchel pudieran llevar a cabo su juego. Además, también hay que tener en cuenta la intensidad del San Roque para igualar la primera parte.

Portu tuvo la ocasión más clara de los rojiblancos con un remate que salió rozando el palo, después de un centro de un Arnau que recibió el balón de Tsygankov en una buena acción por la banda derecha. El extremo ucraniano también trató de deshacer el marcador con un chut, pero resbaló en el momento de ejecutar el tiro y éste terminó fuera.

Era muy difícil trenzar jugadas, sobre todo por la poca movilidad que existía. La mayoría del equipo estaba estático, salvo Arnau, que intentaba proponer más. A medida que se acercaba el descanso, los de Juanma Pavón pusieron una marcha más y al Girona le tocó sufrir de lo lindo. Fuidias estuvo providencial para sacar un remate de Becken fruto de un córner. Así como Miguel para evitar el gol salvando los muebles bajo palos.

En el segundo tiempo entró Savinho por Kébé, que va entrando progresivamente en el equipo después de la lesión. Valery consiguió lo más difícil hasta entonces, abriendo la lata con un gol tras asistencia de Arnau. Era lo mejor que podía pasar. Pero duró poco la celebración. El San Roque empató rápidamente la eliminatoria mediante el pichichi Mizzian, aprovechando un error defensivo de Bernardo.

El Girona debía volver de nuevo a la carga con el batacazo que había supuesto la diana del delantero con pasado en el juvenil del Real Madrid. Por el contrario, los de Lepe estaban más motivados que nunca por haber comprobado que son capaces de marcar a un Primera División.

Míchel introdujo más cambios, sustituyendo a Miguel por Yan Couto y, en consecuencia, cambiando el dibujo. El desgaste del equipo cada vez era mayor. Por lo tanto, había que evitar la prórroga y los penaltis fuera como fuera. Portu y Yan Couto tuvieron dos ocasiones seguidas, rechazadas por la defensa local. También Stuani, que envió el balón al palo, y Savinho, que recibió el rebote y se topó con el portero.

Sufrimiento con un XI titular

No era suficiente. El Girona finalizó el partido jugando casi casi con el once titular de la Liga. Dovbyk e Iván Martín entraron por Tsygankov y Portu, coincidiendo el delantero ucraniano con Stuani en el terreno de juego.

Sin embargo, Fuidias se tuvo que lucir para impedir el segundo del San Roque. En este caso, se equivocó Juanpe. A continuación, Valery se impuso a Jacobo, que avanzaba solo hacia el área rojiblanca. Se sufrió, hasta que Savinho, en el último minuto del partido, sentenció la eliminatoria con un golazo con la zurda.