Ter Stegen: premio al compromiso y a la ambición

En tiempos difíciles, cualquier buena noticia es una bendición. El Barça se encuentra en un momento nefasto económicamente e incierto a nivel deportivo, intentando pasar página y superar definitivamente un trágico adiós de Leo Messi que solo el tiempo curará. El conjunto azulgrana, sin embargo, tiene motivos para el optimismo. Para la ilusión. Ansu Fati está bastante cerca de regresar tras casi un año de inactividad, varios jóvenes de la Masia prometen muchas tardes de alegría en el Camp Nou, las primeras semanas de Memphis han sido ciertamente esperanzadoras… y, este sábado, Marc-André ter Stegen ha recibido el alta médica.

Ronald Koeman recuera a ‘su’ portero antes de la tercera jornada de LaLiga. Y no podría haber mejor novedad. Y más después del partido contra el Athletic Club en San Mamés del pasado fin de semana, en el que el conjunto de Marcelino desarticuló la salida de balón del Barça con una buena presión en bloque alto. Neto sufrió mucho para dar inicio a las jugadas de ataque y el equipo no pudo imponer su dominio, hecho que acreditó que el acierto con los pies del portero es ‘vital’ para un club con un estilo tan peculiar como el azulgrana. Y esta materia, a Ter Stegen, siempre se le ha dado muy bien. La dominaba antes de llegar a Barcelona y, en la Ciudad Condal, la ha perfeccionado y llevado al extremo.

Aunque en otras situaciones lo normal sería que Marc-André regresara a los terrenos de juego paulatinamente –y más considerando que, tras el encuentro contra el Getafe, el parón de selecciones concederá aire, descanso y rodaje a los futbolistas que no sean convocados por su país–, el precedente de la temporada pasada, la ambición del '1' y las malas sensaciones de Neto en La Catedral auguran una titularidad alemana este domingo. Ter Stegen renunció a la Eurocopa para solucionar sus problemas en el tendón rotuliano de la rodilla derecha y poder aprovechar el verano para estar recuperado tan pronto como fuera posible. Realizó una muestra de compromiso ejemplar que ahora verá compensada. Koeman y el barcelonismo confían ciegamente en el guardameta que hizo olvidar muy rápidamente a Víctor Valdés.

Convocado para la tercera jornada de la Liga Santander, 100 días después de ser intervenido en Suecia, Ter Stegen inicia a sus 29 años su octava temporada en el Barça. Lo hace con las pilas cargadas, las fuerzas renovadas y la ilusión intacta tras siete años que han dado para mucho. Para éxitos, pero también para sombrías decepciones. Si todo va bien, a mitad de curso alcanzará los 300 encuentros como azulgrana: de momento ha encajado 272 goles y ha dejado su portería a cero en 114 ocasiones. Guardián del estilo culé bajo palos, capitán sin brazalete, ‘Radio Marc-André’ para los que han tenido la oportunidad de ver en directo un partido suyo a puerta cerrada. El arquero teutón vuelve al ruedo. No podría haber mejor noticia para un barcelonismo necesitado, precisamente, de motivos para sonreír.